España, billete redondo

España logró otra victoria (y con goleada) ante Ucrania que supuso el hito de conseguir el récord de puntos y de imbatibilidad en una fase de clasificación. Y es que el camino al Mundial de Australia y Nueva Zelanda ha sido un camino de rosas para La Roja. Ocho victorias de ocho, 53 goles a favor y ninguno en contra. Esta selección volvió a demostrar ser una de las potencias mundiales. Ante las ucranianas, con muchas de las intocables fuera, se dio un recital. Esther y Redondo lograron sendos dobletes y Jenni completó el marcador de penalti.

Athenea sintió desde el inicio que tenía que ser su partido. La cántabra estuvo más desaparecida en el choque ante Hungría. Por eso en la primera jugada cogió el balón en la banda y se regateó a cuatro jugadoras rivales. En España no parecía haber muchas normas, con un once muy novedoso, y las jugadoras cambiaban de posición como les parecía. Jenni y Esther estaban completamente libres. Carmona lo intentaba más hacia dentro. Así llegaron las primeras oportunidades. Zornoza, que repetía de titular tras su gran actuación el viernes, probó con un disparo desde lejos. En la siguiente fue Alba la que dio un pase de la muerte a Esther, que se encontró con la guardameta muy bien colocada.

A la tercera fue la vencida. Esta vez la granadina cogió la asistencia de Jenni y mandó sin miramientos el balón al fondo de la red. Otra vez la delantera del Real Madrid abría el marcador. Se está ganando a pulso ser la nueve de referencia de La Roja, algo que seguro que no le molestas en absoluto a Jenni. La jugadora del Pachuca, por su parte, coge protagonismo en la mediapunta y es más libre para iniciar la jugada.

Aunque la intensidad era menor que en otros partidos, España firmó el segundo antes de la media hora. Alba Redondo fue otra de las que dio buenas sensaciones ante esta gran oportunidad que le brindó Vilda. El tercero también fue obra suya. Ucrania probó a España a la contra, pero Lola Gallardo estaba en el sitio perfecto para hacer un paradón. La sevillana nunca defrauda.

Esther, con más ganas que nunca, buscó el remate desde el primer palo y logró el doblete solo tres minutos después. La segunda parte vino acompañada de más cambios: hubo oportunidades a jugadoras como Rocío o Guerrero. Un penalti cometido sobre Carmona lo tranformó Jenni. La madrileña no falla. Tras la salida de Amaiur, España probó un trío ofensivo inédito. Había que hacer probaturas.

Fue un festival de goles y buen fútbol del equipo español. Se volvió a demostrar ser eso, un equipo. A pesar de que los días de concentración empezaron siendo difíciles, se ha llegado a cerrar la fase de clasificación para el Mundial de forma sobresaliente. Sello de oro de una generación con muchas ganas de lograr algo grande.