Volvió para esto. Una amigdalitis impidió que Cata Coll estuviera disponible para el debut de la Selección española en esta Eurocopa ante Portugal y el runrún fue aumentando con el paso de las jornadas. Adri Nanclares, un año menor que la balear y otra de las porteras españolas con más proyección, jugó, y muy bien, los tres partidos de la fase de grupos. Pero cuando llegó el día D y la hora H, 18 de julio, 21:00 horas, la elegida por Montse Tomé fue Cata Coll. Hubo voces que lo cuestionaron, recordando incluso sus irregulares actuaciones en los Juegos de París, marcadas por su fractura de nariz. Tras sus paradas ante Alemania, no existen.

Porque si Aitana Bonmatí pudo plantarse ante Berger para aprovechar el único error de la guardameta alemana en 113 minutos de semifinal fue porque Cata negó el gol con dos espectaculares intervenciones a Bühl y Wamser en el 94’. En la primera, voló.

Y pocas personas sabían que Catwoman pudiera hacerlo. Para la segunda, despegó su cuerpo de la red y llegó a tiempo para llevar abajo una rodilla que ya forma parte de la historia del fútbol español. La mujer de azul se había vuelto a poner el traje... De esa superheroína que también asaltó la titularidad de la portería de La Roja al inicio de las eliminatorias del Mundial de 2023. Ya ha despejado las dudas. A quien las tuvo, claro.

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí