El Madrid vuela para ser segundo
El equipo blanco encadena su mejor racha histórica con nueve victorias consecutivas en Liga y desbanca al Levante. Goles de Esther (2), Gálvez y Athenea.
Precisión, potencia y velocidad. El Real Madrid vuela. Se deshizo de una Real Sociedad afligida por los problemas desde el inicio con los goles de Rocío Gálvez, casi abonada a las aerolíneas, Esther (2) y Athenea. El equipo blanco, con sus futbolistas vestidas con la capa de superheroínas casi invencibles en Liga F, sumó su novena victoria consecutiva para desbancar al Levante en la segunda posición de la tabla. Bernabé, lesionada de la rodilla, preocupa al club txuri-urdin.
Hubo novedades en ambos onces. Toril regresó al 1-4-2-3-1, quizás porque la Real Sociedad no era, a priori, rival menor y se llevaron la titularidad Olga Carmona, que se perdió en anterior choque, y Kenti, en el lateral derecho. Por su parte, Arroyo optó esta vez por Lete bajo palos e hizo otros cuatro cambios con respecto al último partido: Bernabé, Vanegas, Gemma y Jensen. Fue la atacante noruega la primera en crear peligro: pase filtrado de Eizagirre y remate fuera que celebraron la mayoría del medio millar de personas que se acercaron al Di Stéfano este gélido miércoles de febrero.
El Madrid, no obstante, no se puso nervioso. Construía desde atrás, con Zornoza y Toletti masticando, veloz, cada jugada. Esther disparaba, sin peligro, en el 12′. Fue justo antes de que Weir centrara una falta lateral desde la izquierda para que Gálvez, con uno de sus característicos saltos, rematara el balón a las mallas. Un cuarto de hora había bastado a las merengues para poner el marcador a su favor. Se estaban gustando. Athenea y Feller se divertían cambiándose de banda y la cántabra casi marca en el 23′ tras un pase de la francesa.
Para ese entonces la desgracia ya se había presentado en forma de lesión para una Real Sociedad que apenas podía conectar cuando tenía el balón: Bernabé se hizo daño en la rodilla y tuvo que ser sustituida. Mala suerte para una lateral, del Atlético, que está brillando como txuri-urdin. A punto estuvo de caer también Eizagirre, pero la capitana realista sí que pudo continuar sobre el césped. Desde esa zona privilegiada pudo ver a Toletti dando el pase de la muerte a Esther para que esta pusiera el 2-0 cumplida la media hora.
La jugada la había iniciado una Athenea que hacía las carreras cual despegues. Estaba en todas partes. Tanto es así que en el 38′ se llevó la bronca de Misa por perder un balón cerca de su área que casi acaba en gol de Amaiur y en el 39′ estaba cortando una mala entrega de Eizagirre para poner un contundente 3-0 en el electrónico. No sería la última vez que aparecería en un partido de claro color blanco de principio a fin. Toril la vio especialmente inspirada y no la sacó del terreno de juego hasta casi el final. Así pudo poner, desde la derecha, un balón perfecto para que Esther hiciera el 4-1 y se metiera en la pelea por el Pichichi con 14 dianas (Oshoala lleva las mismas y Alba Redondo, 16). El tanto del honor para la incapaz Real Sociedad, que solo daba muestras de vida con su capitana, lo había anotado en el 55′ Vanegas, con un majestuoso testarazo desde el punto de penalti, rematando un córner sacado por la mencionada Eizagirre. El Madrid le quedó grande a las txuri-urdin. Ya le viene grande a casi todos los equipos de la Liga F a excepción de un Barcelona inalcanzable y un Levante que le rascó un empate en la primera vuelta. Ahora, la segunda plaza es blanca. El mejor Madrid ya está aquí y va a toda velocidad.
Sevilla 1-0 Sporting Huelva: Martín-Prieto se impone
El Sevilla pone tierra de por medio con los puestos de descenso tras sumar una importante victoria ante el Sporting Huelva en el partido aplazado de la jornada 16. El equipo blanquiazul, que lució una estrella en el centro de su camiseta en honor a la futbolista de su cadete que falleció la semana pasada, tuvo sus ocasiones, remate al larguero de Castelló incluido, pero fue incapaz de levantar el gol anotado por Martín-Prieto en el 7′ tras recibir una bonita asistencia de Amanda Sampedro, picadita, a la espalda de la defensa.