El Madrid se endulza en Ibaia

El Real Madrid encontró consuelo en Ibaia. Se dulcificó. El trago amargo que fue la décima derrota en el cada vez más Clásico ante el Barcelona quedó olvidado para un equipo blanco que sumó los tres puntos ante el Alavés en la CD José Luis Compañón con dianas de Weir, Oroz y Esther. Las de Toril se mostraron serias en el centro del campo y contundentes en ataque y tumbaron a un Alavés que cae a la zona de descenso al no puntuar tras la victoria del Alhama ayer.

Apostó el preparador cordobés por un sistema de tres centrales con Olga Carmona y Athenea de carrileras y sorpresa arriba: Nahikari y Esther jugaron juntas de inicio. Hasta cinco cambios con respecto a la derrota en la semifinal de la Supercopa hubo en la alineación de un cuadro madridista que no tardó en hacerse con la posesión de balón. Y prácticamente en una de sus primeras llegadas se vio protestando con más que posible penalti de Elba Vergés sobre Esther. La delantera granadina puso en muchos problemas a la pareja de centrales que formaba la catalana junto a Ohale. Parecía un martillo pilón: insistente y luchadora. Como siempre.

Nahikari adquiría una mayor movilidad, intentando conectar con un centro del campo con licencia para fantasear con el buen toque de Oroz, Abelleira y, sobre todo, una Weir que en el 14′ abrió el marcador. La escocesa es capaz de convertir en oro todo lo que toca. Es azúcar contra el amargor. Una jugada de Athenea por la derecha acabó con un balón suelto en el área que la ‘11′ blanca controló y mandó a las mallas con una volea algo mordida.

El camino hacia la séptima victoria consecutiva en Liga F quedaba despejado. Oroz pudo dejarlo claro, casi transparente, en el 18′, pero Jana reaccionó bien. Entonces despertó el Alavés que provocó que Ivana salvara los muebles en el 25′ después de que Garazi de deshiciera de Misa con un elegante sombrerito y buscara a Ane Miren para la definición. En el momento justo apareció la valenciana que después vio a Vergés rematar por encima del larguero en un córner.

Las de Juaristi se animaban y el pitido para el paso por vestuarios estaba a punto de llegar cuando Oroz, ahora sí, atinaba a poner el 0-2. Gol psicológico. Ibaia iba a ser territorio blanco. No llegaron ni a entrar las dudas cuando Misa no fue capaz de blocar un disparo de Sara Carrillo en el 47′ y Ane Miren fallaba a bocajarro tras recoger su rechace. Las que tuvieron no las convirtieron en tantos y eso, en el fútbol, siempre suele pasar factura.

El de la sentencia

Así, en el 61′ Athenea dio una de sus asistencias irrechazables para que Esther pusiera el 0-3 en el electrónico de la fría Ibaia. El bote ante Jana hizo que el esférico fuera imparable. Nunca bajó los brazos un Alavés que recortó distancias en el 79′ con un remate peinado de Sara Carrillo. Merecido gol del honor para unas futbolistas albiazules que lo dieron todo. El Glorioso tendrá que pelear hasta el final para quedarse en Primera. De momento, está en puestos de descenso y el Real Madrid, en los de Champions. Un triunfo dulce para dejar atrás el Clásico más amargo...