Eizagirre: “Zornoza es una jugadora que me ayudó muchísimo”

Está de celebración. Siete años después de su debut en la élite con la Real Sociedad, Nerea Eizagirre (Tolosa, 2000) acaba de cumplir 200 partidos como txuri-urdin. Con 23 años, es capitana y estandarte de un equipo, noveno en la clasificación, que visita al Real Madrid sin conocer todavía la victoria fuera de casa. Eizagirre, no obstante, se muestra confiada en AS en poder sacar “algún puntillo” y habla de su posible regreso a la Selección...

—Enhorabuena por esos 200 partidos con la Real, ¿a por cuántos más va?

—Son muchos... Y eso que tengo 23 años. Mucha gente me dice, ¡qué joven! Y es verdad. Al final empecé muy joven en la Real, debuté con 16 años y todo ha pasado muy rápido. Pienso en mis 200 partidos y digo, uf, no soy consciente todavía de ello. Lo dije otras veces, creo que seré consciente de todo lo que estoy consiguiendo una vez que deje de ser futbolista. Ahora mismo estoy feliz, a gusto, soy consciente de que termino contrato este año... Pero bueno, ya han empezado las negociaciones, no sé dónde estaré después, pero si sigo aquí, ojalá pueda jugar muchos partidos más. Pero bueno, ya estoy en la historia de la Real, creo que 200 partidos no los hace cualquier jugadora y me siento afortunada y orgullosa de ello.

—¿También piensa en hacer historia como goleadora?

—Para alcanzar a Nahikari (máxima anotadora histórica txuri-urdin) intuyo que me quedan muchos goles, ella es una goleadora total. Hace poco me chivaron que estaba a un gol de entrar en el Top-5. Entonces, pues bueno... A ver si puedo marcar ese golito y entrar entre las cinco máximas anotadoras que para mí es bastante ya. No soy delantera ni so soy tan goleadora, de hecho, creo que soy mejor asistiendo que marcando.

—Mencionaba las negociaciones, ¿piensa en renovar entonces?

—Bueno, ya estamos teniendo algo de contacto. Al final cuando terminas contrato, pues siempre intentan tocar cuanto antes. Sí que hay ofertas de otros clubes, al igual que puedo decir que la negociación ya ha empezado también un poco con la Real.

—¿Cómo ha cambiado esa Real a la que llegó con 16 años?

—Antes veníamos aquí a entrenar, a la ciudad deportiva, hacíamos nuestras dos horas de entrenamiento y nos íbamos a casa. A día de hoy venimos pronto por la mañana, tenemos gimnasio, campo, comemos aquí... Son privilegios que antes no tenías. Más horas, mejor preparación, el fútbol profesional es cada vez más exigente y el trabajo tiene que estar ahí. Antes ni teníamos tantos recursos ni el fútbol estaba al nivel que está hoy. Creo que la Real siempre ha sido un club que ha seguido ese proceso de ir mejorando, pero también que todavía tenemos mucho margen de mejora. Ahora nos viene una instalación nueva, que será solo para femenino y eso también nos hace mejores.

—¿Esa apuesta influye en que renueve o no?

—Siempre lo he dicho, mientras que esté contenta y sienta que puedo seguir mejorando aquí, la casa de una siempre es el mejor lugar. Es un club en el que te conocen, donde mejor te cuidan, la Real es una familia, da igual los problemas que puedas tener, deportivos o extradeportivos, que todos se involucran contigo y a mí me han ayudado mucho, a nivel profesional y a nivel personal. Ahora mismo creo que sigo mejorando y tengo margen de mejora, pero es verdad que Natalia Arroyo también termina contrato este año y la apuesta del club está ahí en el aire, entonces creo que tenemos que escucharnos todas las partes y realmente quedarme donde sienta que me quiero quedar y seguir mejorando, ese es el objetivo.

—Decía antes de iniciar la temporada que debían aspirar a estar entre las tres primeras; ¿cómo valora su arranque?

—Tenemos que ser ambiciosas y aspirar a estar con los equipos grandes de arriba. El Barça creo que está en otra liga independiente, pero con grandes me refiero a equipos como Real Madrid, Levante, Atlético de Madrid, Madrid CFF... Seguramente haya otros equipos que se estén acercando y nosotras tenemos que ser uno de los que estén ahí a nivel de juego y futbolistas: estar entre las cinco o seis mejores equipos de la Liga F. El partido del Granada nos condiciona mucho con la expulsión y el derbi no es nuestro mejor partido. Son dos derrotas claras junto a la del Barça, que bueno, todo el mundo cuando ve el calendario cuenta con seis puntos menos porque es la realidad a día de hoy. En casa sí nos hemos mostrado fuertes y tenemos que intentar mejorar cuando salimos de casa, saber jugar sin esa afición que tanto nos empuja y en otro césped que no sea el de Zubieta.

—No han ganado fuera de casa, ¿motiva más visitar el Di Stéfano?

—Valdebebas siempre es un sitio que motiva porque, aparte de que es un campo espectacular para jugar, es un rival que está encima tuyo, que está haciendo las cosas muy bien, un club ganador y siempre motiva jugar estos partidos. Creo que esta semana estamos trabajando bien, el planteamiento del partido nos convence, nos gusta y esperamos no ponerles las cosas fáciles. A ver si estamos cerquita de sumar algún puntillo ahí.

—Están sin Weir, con la que usted fue máxima asistente de la Liga F la campaña pasada...

—Weir nos impresionó a todo el mundo. Nunca había jugado en la Liga española y fue una de las mejores jugadoras del año pasado. A mí la verdad es que me gustaba mucho verla, hacía cosas determinantes: asistir, marcar, controlar, regatear... Es una jugadora muy top. Una pena que al final una lesión tan fuerte le tenga que dejar fuera de los terrenos de juego. Creo que el Real Madrid la va a echar mucho de menos. Pero bueno, otras jugadoras también lo están haciendo bien en el medio, Tere, Zornoza, Maite...

—¿A cuál de sus rivales de hoy conoce mejor?

—A la que mejor conozco es a Claudia Zornoza, por su etapa en la Real. Compartí vestuario con ella un año, me llamaba Enana, bueno, me lo sigue llamando y tendré 10 años más y me seguirá llamando así. Siempre seré su Enana. Junto a Naiara Beristain ha sido una de las jugadoras que ese año me marcaron mucho porque me ayudaron muchísimo. Es verdad que en la Selección he compartido muchos momentos y entrenamientos con varias jugadoras que están en el Real Madrid, pero con la que más he estado en el día a día es Claudia. A Maite Oroz y Oihane, al ser dos jugadoras vascas, tanto de la selección vasca como de haber sido rivales, también las conozco bien.

—¿Ha habido algún mensajito de pique previo al partido?

—(Se ríe...) Mira, justo le escribí a Clau para preguntarle le sobraba alguna entrada porque necesitábamos algunas del equipo. Hay mucha gente que quiere ir a vernos a Madrid, pero no hablamos nada del partido.

—La Liga F comenzó con huelga por el nuevo convenio colectivo, ¿sienten que se está ya cerca de firmarlo?

—Fueron semanas complicadas porque a nadie le gusta tener que hacer una huelga para su primer partido de Liga. Pero creo que hemos llegado a un acuerdo y estamos cerca de firmar ese convenio. No solo para nosotras, porque es verdad que igual hay clubes que están mejor económicamente y otros clubes que igual no se puedan permitir tanto, pero al final esto es para las generaciones que vienen. Es importante que cuando den el salto al primer equipo ya se puedan dedicar al 100% a esto y que no tengan que trabajar o hacer horas extra para poder llegar a final de mes. A día de hoy, siendo fútbol profesional, pues tiene que ser profesional en todos los sentidos.

—Se viene hablando mucho del VAR, ¿necesario ya o hay otras prioridades?

—Estoy de acuerdo en que todavía hay muchas más cosas que mejorar antes de que llegue el VAR. Quiero decir, todavía estamos jugando partidos en campos de hierba artificial. Yo prefiero jugar en hierba natural y después poner el VAR antes que estar jugando en campos de artificial. Al final condiciona a los equipos, la prevención de lesiones... El VAR, pues sí, es algo que puede ayudar a las cuatro árbitras que suelen estar en el campo, pero también digo, viendo todo el follón que hay en el masculino, que cada fin de semana se discute todo lo que pasa, ya no sé si el VAR nos puede ayudar o no. Está siendo un jaleo. Creo que las normas tienen que ser más estrictas, si la mano dentro del área es penalti, pues que lo sean todas.

—Para acabar, la Selección, ¿ha tenido contacto con Montse Tomé?

—No, no he tenido ningún contacto. A ver, yo siempre he tenido buena relación con Montse y creo que lo está haciendo bien. Han ganado los partidos y sigue con un estilo adecuado de juego para las futbolistas que están yendo. Me estoy centrando más ahora mismo en hacerlo lo mejor posible en el club, intentar aportar lo máximo al equipo, ir sumando de tres en tres cada fin de semana y si en algún momento tengo la llamada de la Selección, pues iré, porque creo que a día de hoy hay otras personas al mando, que las cosas están cambiando, se están mejorando y eso era lo que todas queríamos desde el principio. Me alegro de que las cosas estén mejorando y sea algo positivo para todas las personas que podamos ir o estén yendo a día de hoy a la Selección.

—¿Pero tiene los juegos en mente?

—Bueno... Eso dependerá también de mi nivel en la Real. Lo que depende de mí es seguir trabajando, mejorando y ser una jugadora importante en mi equipo para que esté lo más arriba posible. Después deciden ellos: quién quiere ir, quién no, quién creen que para cada posición puede ser la persona adecuada. Si en sus planes entro en algún momento, estaré contenta y feliz para poder estar allí y después ya se verá después de cada concentración si puedo estar en esos Juegos o no.

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