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SELECCIÓN (F)

A la RFEF se le pasa el plazo para convocar a las jugadoras

El pasado 4 de septiembre fue el último día permitido por la FIFA para mandar a los clubes la solicitud de liberación de las futbolistas.

El presidente interino de la RFEF, Pedro Rocha, durante una rueda de prensa.
PEPE ANDRESDiarioAS

Nuevo problema en la RFEF. El próximo día 15 de septiembre la nueva seleccionadora, Montse Tomé, tiene que dar la lista de convocadas para los partidos de Nations League contra Suecia y Suiza, claves para la clasificación de los Juegos Olímpicos. Pero, al menos 15 días antes, la Federación tenía que haber enviado a los clubes la solicitud de liberación de las jugadoras, algo que no ha sucedido, según ha podido saber AS.

Según establece la FIFA en el reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores, el pasado día 4 fue el último en el que la Federación podía mandar a los equipos la liberación de las futbolistas, ya que el parón está fechado entre el 18 y 26 de septiembre. “La asociación que desee convocar a un jugador deberá hacerlo por escrito al menos 15 días antes del primer día del periodo internacional en el que se lleven a cabo las actividades del equipo representativo para el que se le necesita. Al mismo tiempo, se deberá comunicar por escrito la convocatoria al club del jugador. Asimismo, se aconseja a las asociaciones incluir a la asociación del club en cuestión en la convocatoria”, recoge la institución en el apartado tres del anexo 1.

Esto deja la decisión en manos de los equipos que, al haber recibido la petición de la RFEF fuera del plazo establecido, también podrían retrasar el día en que sus futbolistas puedan acudir a la concentración. Además, el reglamento afirma que “el club deberá confirmar la liberación del jugador dentro de los seis días siguientes”.

Las futbolistas que han renunciado a ir convocadas por la Selección hasta que se produzcan cambios significativos en la RFEF, entre las que se encuentran las 23 campeonas del mundo, no han manifestado su cambio de opinión. El despido de Jorge Vilda y la llegada de Tomé como nueva seleccionadora, y el nombramiento de Elvira Andrés como nueva directora del Gabinete de Presidencia, han sido las únicas modificaciones.