El sueño del Sanse contra la obligación del Alcorcón

Hace un año ambos equipos estaban en Segunda División. Y ahora quieren volver a la categoría de plata por la vía rápida. Pero el contexto de ambos proyectos es muy diferente. Mientras para el Sanse estar en el playoff es un sueño, después de tener que rehacer casi al completo el proyecto del filial txuri-urdin; para el Alcorcón es casi como una obligación superar esta primera eliminatoria para cumplir el objetivo del ascenso, porque el suyo es uno de los equipos que estaban llamados a liderar el Grupo 1 de la Primera Federación y, por tanto, subir directamente.

Por presupuesto y jugadores, se puede pensar que la presión es toda para el equipo alfarero, y que el filial de la Real Sociedad juega con toda la libertad de haber hecho su temporada y considerando este playoff como un premio merecido a las muchas dificultades que ha ido superando poco a poco durante el año. No hay que olvidar que el filial se tuvo que reconstruir después del descenso de la Liga Smartbank, empezando por el banquillo. Se marchó Xabi Alonso, ahora en Leverkusen, y se le dio la oportunidad a Sergio Francisco, que venía de triunfar en categorías inferiores y confió en gran parte de su Real C, dándole empaque al equipo con alguno de los pilares del proyecto de Segunda: Olasagasti, Arambarri, Ander Martin, Magunazelaia, Gabilondo, Jonathan Gómez, Martón, Garrido… sin olvidar la explosión de Pablo Marín, lesionado el curso pasado.

La mayoría de los jugadores del Sanse ya sabe lo que es jugar con el primer equipo de la Real. Todo esto significa que el Alcorcón se va a encontrar a un filial atípico, porque bastantes de los potrillos está habituados a disputar partidos de la tensión de los que se esperan en el playoff. El primer capítulo se vivirá en el Z7 de Zubieta, el campo habitual donde el Sanse ha jugado sus partidos durante la temporada regular. Se planteó llevar el partido a Anoeta, o incluso jugar en el campo principal de Zubieta, que es más grande y cuya grada tiene más capacidad, pero no quisieron los potrillos por estar acostumbrados a las distancias del campo que está más alto en la ciudad deportiva de la Real. Eso restará en la única grada que hay aficionados alfareros, deseosos de acudir a animar a su equipo en busca del camino de regreso a la división de plata.

Llega a tope el Alcorcón. Fran Fernández habla de “asumir el partido con naturalidad, manejando la parte emocional. Lo hecho hasta ahora en Liga no sirve absolutamente para nada”. Once de gala en los alfareros.