Ambiente histórico en el Heliodoro
Desde 2010 que el estadio no acogía a más de 22.000 espectadores en un partido del Tenerife. Ante el Girona, este pasado domingo, faltaron 741 aficionados para el lleno absoluto.
Este pasado domingo, ante el Girona por la final por el ascenso, faltaron 741 personas para poder afirmar que en el Heliodoro no cabía un alma más y que tenía todos sus asientos ocupados. Es que la capacidad total del estadio es de 22.824 espectadores y contra los catalanes la cifra oficial fue de 22.083. Se vivió, de todos modos, un ambiente histórico.
Sucede que desde el 2010, cuando el Tenerife militó por última vez en Primera División, que no había un registro tan importante. En aquella ocasión, solo las visitas del Real Madrid y el Barcelona congregaron tanta gente. Y el estar a un paso de ascenso volvió a animar al público. Lo anecdótico es que en los tres casos, se perdió el partido.
Esta campaña, los de Ramis no habían conseguido superar nunca la barrera de los 20.000 aficionados, pese a la gran campaña del equipo. La mejor entrada en la fase regular había sido contra el Real Valladolid, en marzo (18.587), mientras que en el derbi del Playoff ante Las Palmas hubo 19.732. En 2017, cuando vino el Cádiz por la Promoción, fue la cifra más parecida a la del pasado fin de semana (21.761 seguidores).
De todos modos, esta temporada el promedio de afluencia en el Rodriguez López ha sido bastante bueno: 11.989 hinchas. El público se fue animando conforme avanzaba el campeonato porque de los 5.059 del primer partido en casa ante el Sporting se pasó a superar los 10.000 en los últimos once. Vale recordar que al inicio del certamen todavía regía un aforo limitado.
“Los jugadores son los que han conectado a nuestra afición”, admitió Ramis en la previa del partido contra el Girona. “Sabía que si le dábamos lo que ellos querían nos iban a respaldar. No ha sido fácil, ha sido un proceso. Hemos tenido la fortuna de que hemos sido constantes y cada vez nos ha acompañado más”, apuntó el míster.