Los fans del Chelsea saldrán a la calle por los Ricketts

"La actitud es una cosa pequeña que hace grandes diferencias", repetía Winston Churchill a sus más allegados. Una cita del histórico primer ministro británico, que vivió en Pimlico, a escasos kilómetros de la Stamford Gate, la puerta de acceso al estadio de Stamford Bridge donde los aficionados del Chelsea se manifestarán contra la familia Ricketts el próximo sábado 2 de abril a las 12:00 horas de Reino Unido.

Los Ricketts podrían convertirse en los nuevos propietarios del Chelsea en las siguientes semanas, pero la hinchada blue se ha posicionado en contra de su oferta por su posición ideológica. Unas ideas extremistas que se manifestaron en una serie de correos electrónicos filtrados en los que Joe Ricketts, patriarca de la familia, aseguraba que los musulmanes eran sus "enemigos" y el islam era una "cosa del diablo" y no era "una religión".

Pero hay más. Antes del inicio de la campaña presidencial de Donald Trump, al que los Ricketts apoyaron económicamente, otro miembro de la familia, en este caso Todd Ricketts, se refirió al COVID como el "Kung-flu" -virus chino, en español-. No solo Joe y Todd, Pete Ricketts también estuvo involucrado en 2020 en una campaña racista en Chicago en la que se trataba a la comunidad negra como "un problema".

El mismo Pete Ricketts se definió en contra del matrimonio homosexual y de la comunidad LGBTQ+. De hecho, en 2013, habló en estos términos de su hermana Laura: "Es gay, pero no estoy de acuerdo con ella en este tema". Otro comentario que ha encendido las alarmas de la afición del Chelsea, que inició una campaña en redes sociales con el lema "No to Ricketts" -no a los Ricketts, en español-.

Sin embargo, la candidatura de los Ricketts ha seguido adelante en el proceso de selección gestionado por el banco Raine Group con el que la familia inversora habría llevado a cabo negocios en el pasado y por lo que podría existir un conflicto de intereses. Todo esto a pesar de la posición de los fans blues, que ahora quieren dar un paso más y protestar a las puertas de Stamford Bridge, como cuando se anunció el proyecto de la Superliga.

Esta vez se espera que las nuevas movilizaciones tengan el mismo recorrido, y por eso se han anunciado a través de un comunicado oficial en redes sociales. Con el lema "No to Ricketts protest" -protesta de no a los Ricketts, en español-, la afición del Chelsea pedirá al gobierno británico, a la Premier League y al Chelsea que retire a los Ricketts del proceso de compra.