Grandes equipos como el Chelsea, Monaco o Vitesse están controlados por propietarios rusos, además del potente patrocinador Gazprom.
Que el fútbol sea el deporte más popular de Europa conlleva que sea una industria muy golosa para todo lo que no esté relacionado con el fútbol. Históricamente se ha utilizado para hacer propaganda política y con la llegada de lo que se conoce como fútbol moderno se popularizó la publicidad. En general, se usa para ganar dinero y no son pocos los nombres rusos que aparecen en la lista Forbes de las personas más ricas del mundo cada año.
Abramóvich es el primer apellido que se te viene a la cabeza cuando piensas en un multimillonario ruso invirtiendo en fútbol. Llegó al Chelsea en 2003 y en Stamford Bridge le tienen que querer como a la estrella que es porque cambió totalmente la historia del club. Hasta su llegada, el equipo contaba con una liga, cinco copas y dos Recopas en su palmarés, además de haber pasado varias veces por Segunda división. Hoy en día, el Chelsea es uno de los clubes más grandes de la Premier League y, por tanto, de Europa.
Nada más llegar, Abramóvich supuso una revolución en el club londinense. Recién aterrizado en la capital se enteró de que Zola, la mayor estrella del club hasta entonces, se había marchado al Cagliari. Su primera gestión fue llamar a Massimo Cellino, presidente del equipo italiano, para corregir el error: “¿Cuánto cuesta Zola? ¿No está a la venta? ¿Y cuánto cuesta el Cagliari?”. Se tuvo que quedar con las ganas, pero no con el dinero en la cuenta. Ese mismo verano gastó en compras 170M€ (esa cifra, en 2003, era una auténtica barbaridad) sin ingresar ni un solo euro por ventas. A Crespo, Verón o Makélélé les acompañaron los siguientes años Essien, Drogba o Shevchenko, además de José Mourinho, el creador del primer gran Chelsea de la historia.
Abramóvich, al que se le estima una fortuna de 14,5 mil millones de dólares conseguida en su día a través de su empresa petrolera Sibneft, se ha visto obligado a dejar de lado la propiedad del club, de momento cedida a la Fundación, después de las presiones gubernamentales inglesas por sus vínculos con Putin. Este miércoles anunció que el club estaba en venta con un detalle en su comunicado: todas las ganancias netas de la venta irán destinadas a una fundación que ayuda a las víctimas de la guerra.
Los propietarios de los clubes:
CHELSEA
Roman Abrámovich
Edad:
55 años
Propietario del club:
2003-2022
Sector:
Metalurgia y energía
Patrimonio:
14.500 millones de dólares
ARSENAL
Alisher Usmanov
Edad:
68 años
Propietario del club:
2007-2018
Sector:
Metalurgia
Patrimonio:
18.400.000 millones de dólares
BOURNEMOUTH
Maxim Demin
Edad:
52 años
Propietario del club:
2011- actualidad
Sector:
Petróleo
Patrimonio:
desconocido
MÓNACO
Dmitry Rybólovlev
Edad:
55 años
Propietario del club:
2011- actualidad
Sector:
Minería
Patrimonio:
6.700.000 millones de dólares
VITESSE
Valeri Ojf
Edad:
58 años
Propietario del club:
2018- actualidad
Sector:
Energía y minería
Patrimonio:
desconocido
Los propietarios de los clubes:
CHELSEA
Roman Abrámovich
Edad:
55 años
Propietario del club:
2003-2022
Sector:
Metalurgia y energía
Patrimonio:
14.500 millones de dólares
ARSENAL
Alisher Usmanov
Edad:
68 años
Propietario del club:
2007-2018
Sector:
Metalurgia
Patrimonio:
18.400.000 millones de dólares
BOURNEMOUTH
Maxim Demin
Edad:
52 años
Propietario del club:
2011- actualidad
Sector:
Petróleo
Patrimonio:
desconocido
MÓNACO
Dmitry Rybólovlev
Edad:
55 años
Propietario del club:
2011- actualidad
Sector:
Minería
Patrimonio:
6.700.000 millones de dólares
VITESSE
Valeri Ojf
Edad:
58 años
Propietario del club:
2018- actualidad
Sector:
Energía y minería
Patrimonio:
desconocido
Los propietarios
de los clubes:
CHELSEA
Roman Abrámovich
Edad:
55 años
Propietario del club:
2003-2022
Sector:
Metalurgia y energía
Patrimonio:
14.500 millones de dólares
ARSENAL
Alisher Usmanov
Edad:
68 años
Propietario del club:
2007-2018
Sector:
Metalurgia
Patrimonio:
18.400.000 millones de dólares
BOURNEMOUTH
Maxim Demin
Edad:
52 años
Propietario del club:
2011- actualidad
Sector:
Petróleo
Patrimonio:
desconocido
MÓNACO
Dmitry Rybólovlev
Edad:
55 años
Propietario del club:
2011- actualidad
Sector:
Minería
Patrimonio:
6.700.000 millones de dólares
VITESSE
Valeri Ojf
Edad:
58 años
Propietario del club:
2018- actualidad
Sector:
Energía y minería
Patrimonio:
desconocido
Sin embargo, y aunque sea el más famoso, este no es el único propietario ruso que tiene el fútbol inglés, ya que Maxim Demin es el actual accionista mayoritario del Bournemouth, al que llegó en 2011. Con una inversión notablemente más modesta que la de Abramóvich, bajo su mandato el club ascendió a la Premier League en 2015 con un proyecto muy admirable gracias a Eddie Howe. Juegan en Segunda desde 2020.
De vuelta a Londres, el Arsenal tuvo en Alisher Usmanov (al que se le presupone una fortuna de 18,4 mil millones de dólares) a uno de sus accionistas más importantes. Usmanov, copropietario de Red & White Securities, participó en el club desde 2007 hasta 2018, cuando el actual propietario del Arsenal, Stan Kroenke, le compra el 30% que pertenecía a Usmanov y, de esta forma, despedía al ruso de la directiva gunner. Hasta este miércoles, Usmanov tenía patrocinios en el Everton a través de sus empresas USM, Megafon y Yota que han sido suspendidos.
En la Ligue 1 y a la vez que el PSG, el Mónaco recibió un espaldarazo financiero externo. Fue gracias a Dmitry Rybolóvlev (Forbes le estima un patrimonio de 6,7 mil millones de dólares), que adquirió dos tercios del club cuando estaba en Segunda división. Su prometedor proyecto convenció a Claudio Ranieri, que aceptó coger al club en Ligue 2 en julio de 2012 para ascenderlo esa misma temporada. Poco a poco fue aumentando la inversión hasta que, en 2013, gastó 160 millones de euros en fichajes habiendo ingresado solo 5 millones en ventas. Aquel año, además de pagar sueldos como los de Berbatov, Carvalho o Abidal, que llegaron libres, ficharon por grandes cifras a James Rodríguez, Falcao, Moutinho, Kondogbia, Toulalan...
Rompen relación por la guerra
*Hasta 2018
R U S I A
Clubes de fútbol con
propietarios rusos
Patrocinios
Rompen relación por la guerra
Patrocinios de
Rompe relación
por la guerra
R U S I A
Clubes de fútbol con
propietarios rusos
*Hasta 2018
Rompen relación por la guerra
Patrocinios
R U S I A
Clubes de fútbol con
propietarios rusos
*Hasta 2018
Más allá de este verano, Rybolóvlev no hizo grandísimas inversiones pero sí aportó al club una dirección deportiva envidiable para terminar creando su proyecto más exitoso hasta la fecha, el Mónaco de 2016-17 que ganó la Ligue 1 y alcanzó las semifinales de la Champions. Jugadores como Bernardo Silva, Bakayoko, Lemar o Fabinho habían llegado temporadas atrás como promesas y aquella temporada rindieron como estrellas. Por no hablar, claro, de Mbappé, firmado de la cantera del Bondy con catorce años. Hace años que el Mónaco ya no es capaz de competir por el título, pero sigue siendo una referencia a nivel europeo como generador de jóvenes promesas.
En los Países Bajos encontramos al Vitesse, que desde 2010 tiene un propietario extranjero. Primero fue el georgiano Merab Zjordania, quien en 2013 se lo vendió al ruso Alekasandr Tsjigirinski. Este último se lo vendió a su compatriota Valeri Ojf, quien ya estaba dentro de la directiva del club años atrás, en 2018. Se notó su mano cuando firmó como nuevo técnico a Leonid Slutsky, una leyenda de los banquillos en el fútbol ruso que solo duró una temporada y media en el cargo. Más allá de eso, el Vitesse, que logró en 2017 una Copa, está viviendo una de las etapas más dulces de su historia esta temporada jugando los octavos de final de la Conference League.
Además de estas propiedades, el dinero ruso influye fuertemente en el fútbol a través de Gazprom, la mayor empresa del país. Esta compañía de gas y petróleo tiene patrocinios en el Zenit (del que es propietario desde 2005), el Schalke 04, el Chelsea o el Estrella Roja, además de la UEFA a través de la Champions League y de la FIFA. Tras estallar la guerra, algunos de estos patrocinios se han roto dada la relación de Gazprom con el Gobierno de Putín. No es de extrañar que, al igual que ha ocurrido con estos contratos o con la dirección de Abramóvich en el Chelsea, el fútbol europeo siga haciendo fuerza para desmarcarse de toda relación con el gobierno ruso dada la fuerte presión social que existe hoy en día contra sus actuaciones en Ucrania.