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ENTREVISTA

Dani Olmo: "Me fui del Barça para estar donde estoy hoy"

El jugador español del RB Leipzig repasó la actualidad en La Futbolería, de AS, y recordó su salida del club culé, su paso por Croacia y su llegada a Alemania.

-¿Cómo va la adaptación a la Bundesliga?

-Muy bien. Estoy contento de que todo haya vuelto un poco a la normalidad y hayamos podido jugar los primeros partidos. A seguir trabajando, que todavía quedan algunos partidos más. Estamos luchando por entrar en Champions, que aún no está cerrado del todo. Trabajando hasta el final.

-¿Tuvo que adaptarse a la exigencia física en Alemania?

-Yo llegué aquí tras una buena pretemporada, ya que en enero se para. Físicamente estuve bien preparado, las pretemporadas allí en Croacia también son bastante duras. No me costó mucho adaptarme a los entrenamientos. Sí que es verdad que, al principio, es un poco duro porque no conoces a nadie y la intensidad es mayor. Pero yo me sentí bien y no tuve ningún problema.

-JJOO 2021, Eurocopa 2021, Eurocopa Sub21 2022: ¿qué elegiría?

-¿Se pueden elegir las tres? (risas) Si no coinciden en fechas, ¿por qué no? No, no puedo elegir ninguna opción en concreto. Los JJOO y la Eurocopa son un sueño y la Eurocopa con la Sub21 fue mi mayor experiencia de mi corta carrera aún. Volver a repetir esa experiencia sería increíble.

-Luis de la Fuente habla maravillas de usted. ¿Pudo hablar con él durante este confinamiento?

-Sí, mantuvimos el contacto. Hace poco di otra entrevista y el míster también me hizo una pregunta.

-¿Cómo ha sido la experiencia de jugar a puerta cerrada?

-Un poco extraña, sobre todo después del gol. Tenía muchas ganas de celebrarlo con todos y, al final, fue bastante frío todo. Pero bueno, es lo que toca. Lo importante es la seguridad y la salud de todos. Si no se puede, pues no se puede. Es una pena porque el fútbol sin afición no es lo mismo, pero ahora es lo que toca. Seguiremos luchando también por ellos, que estoy seguro de que nos estarán viendo desde casa.

-Restan cuatro jornadas en la Bundesliga, entre ellas el partido que enfrentará al Leipzig con el Dortmund de Haaland.

-Antes de enfrentarnos al Dortmund nos quedan dos partidos. En estos últimos cuatro partidos todos los puntos son vitales teniendo en cuenta lo apretada que está la zona de Champions. El Bayern está un poco más descolgado, pero tanto el Dortmund como nosotros, el Leverkusen y el Gladbach estamos luchando por esa segunda, tercera y cuarta posición y entrar en la Champions. Esos cuatro partidos que vienen son importantes, ante todo ese duelo directo con el Dortmund que decidirá quién puede optar a esa plaza.

-La Bundesliga fue la primera liga en volver y será la primera en acabar. ¿Es una ventaja o, más bien, una desventaja que estén parados un mes hasta que vuelva la Champions en agosto?

- Aún no sabemos nada. Lo único que sabemos es que el último partido de liga es el 27 de este mes, pero no sabemos si vamos a tener unas vacaciones largas o cortas. Lo que sí tengo claro es que, si la Champions se juega finalmente en agosto, tendremos tiempo para prepararnos y estar bien físicamente. Si necesitamos un mes, pues haremos un mes de pretemporada. Dependerá de lo que considere el cuerpo técnico. Si tenemos pocas vacaciones, pues es lo que hay. Jugar la Champions merece cualquier precio.

-Antes de concretarse el fichaje por el Leipzig también sonó para la Serie A. ¿Es cierto que estuvo tan cerca del Milan como se habló en su momento?

-Sí que hubo algún que otro equipo italiano interesado, pero no puedo decir mucho más. Al final decidí fichar por el Leipzig. Pensé que era la mejor decisión y el mejor paso que podía dar dentro de mi carrera. La llamada del director deportivo Markus (Krösche) y de Julian (Nagelsmann, técnico del Leipzig) me convencieron. Me convenció su proyecto de futuro y la manera que tienen de trabajar con jugadores jóvenes. Creo saber que el Leipzig es el equipo con mayor promedio de jugadores jóvenes en la Bundesliga y eso me motivó mucho para venir aquí y seguir creciendo.

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PoolIna Fassbender/Pool via Getty Im

-Su estreno en Champions fue el 4-0 del Dinamo contra el Atalanta. ¿Cree que el cuadro italiano les infravaloró aquella noche?

-No fue un partido fácil, a pesar del resultado. Sabíamos que el Atalanta era un rival muy duro. Fue mi debut soñado. Como entramos en el partido, pudimos contrarrestar su presión de casi hombre a hombre y, al final, el balón entró; que también es importante. El equipo entero firmó un partidazo, estuvimos muy bien en esa primera toma de contacto en Champions.

-¿Cómo lleva el alemán?

 No muy bien que digamos. (risas)

-Llama la atención que sean más bien los visitantes los que están ganado los partidos a puerta cerrada. ¿Se nota la ausencia de afición?

-Sí que se nota un poco. Depende de cada jugador, pero en mi caso me gusta jugar en casa porque estás con tu gente. También me motiva jugar de visitante porque no juegas con tu afición. En cualquier caso pierde un poco esa emoción, pero mantenemos la motivación por quedar lo más arriba posible para estar en Champions el año que viene. La falta de los aficionados no es excusa.

-¿No da la sensación de estar en un entrenamiento sin público?

-A veces sí pasa que pierdes un poco el control y el partido se vuelve loco con idas y venidas. Hay que tener la cabeza fría y saber que es un partido de verdad, porque al final te estás jugando tres puntos de liga. En esos momentos intentamos bajar un poco el ritmo del partido porque, si no, se vuelve un poco loca la cosa y eso tampoco nos beneficia a nosotros.

-¿El técnico Julian Nagelsmann es tan revolucionario como reflejan sus alineaciones?

-Sí, cambiamos casi cada partido. Un día podemos jugar con defensa de tres, el otro día lo hicimos con cuatro. Para nosotros tampoco es problema. Tenemos muchos jugadores que pueden jugar en distintas posiciones. Yo, también. A mí me ha utilizado de carrilero, pivote, mediapunta y delantero. Creo que es un plus contar con ese tipo de jugadores y con un entrenador al que le guste variar. Cambia para buscar la victoria. Cambiamos de esquema cada partido dependiendo del rival. Con tantos jugadores polivalentes nos adaptamos bien a los sistemas.

-¿En qué posición se siente más cómodo?

-Me siento mejor jugando de mediapunta, por detrás del nueve.

-¿Le ha sorprendido la Bundesliga?

-Sí, los estadios, por ejemplo, son increíbles. Por eso se nota ahora la diferencia entre jugar con o sin público. Aquí, prácticamente todos los equipos de la Bundesliga llenan sus estadios. Es algo bonito.

-En la televisión se suelen utilizar sonidos enlatados. ¿Ayudaría también a los jugadores ponerlos en el estadio por megafonía o es mejor el silencio y poder escucharos entre vosostros?

-Seguro que sería más ameno para nosotros, pero tampoco escucharíamos las palabras del entrenador o de los compañeros. Tampoco creo que sea un factor que pueda influir mucho en el partido.

- Werner sigue marcando con o sin espectadores. ¿Qué le convierte en un nueve tan especial?

-Timo es un jugador rapidísimo y, teniendo en cuenta cómo jugamos, nos da muchísimo. Lo que intentamos nosotros es jugar rápido siempre y, cuando podemos, a la espalda de la defensa. Él es un jugador que, con espacios, es muy difícil de parar. Otra virtud que tiene es el gol. Tiene una y la mete. Tiene mucha facilidad para marcar. Esta temporada en la Bundesliga ha metido 25 y, seguramente, marcará más. Nos da muchísimo.

-Usted figura en el Top10 de canteranos más valiosos del Barça junto a Messi. ¿Un orgullo, no?

-Pues sí. No lo había visto. Pero cuando me fui a Zagreb, la idea era estar donde estoy ahora mismo. Se puede dar por buena esa decisión. Ahora también estoy trabajando más que nunca. En este período de cuarentena me he centrado en entrenar. He montado un pequeño gimnasio en un espacio que tengo en mi casa para no perder el tono. Es importante al venir a una liga tan fuerte como es la Bundesliga, no te puedes quedar atrás.

-Este año, el Bayern tiene encarrilada su octava ensaladera consecutiva. Para el año que viene toca la primera del Leipzig, ¿no?

-Ahí estaremos para luchar. Hemos dejado escapar puntos. Tuvimos algunos empates en casa también, pero hay que seguir luchando hasta el final y, luego, prepararse para todo lo que esté por venir.