1x1 Barcelona: Griezmann sigue en modo abrelatas

Ter Stegen: Hizo la estatua en el gol de Mertens, quizás por culpa de Piqué que le impidió ver la trayectoria del balón, pero luego se sacó la espina con sendas intervenciones a remates a bocajarro de Insigne y Callejón. Decisivo para que el Barcelona no se marchara con la eliminatoria cuesta arriba.

Semedo: Fundamental en la asistencia del gol de Griezmann, tanto por su desmarque en profundidad tras un gran pase de Sergio Busquets y posterior pase al delantero francés. Rápido y solvente en la banda derecha.

Piqué: Lo peor es que acabó el partido lesionado en el tobillo derecho en una jugada fortuita tras un mal salto. El central, antes de retirarse del campo, estaba realizando un partido serio, aunque por culpa suya llegó el gol del Nápoles.

Umtiti: El francés sigue mostrando síntomas claros de inseguridad por culpa de su lentitud. En la salida de balón dio soluciones razonables al equipo.

Junior: Fatal. Partido para olvidar el suyo. Sin ideas, sin profundidad, sin convicción y sin contundencia. Si este es el nivel para el partido en el Bernabéu, que Dios nos coja confesados.

Sergio Busquets: Sigue siendo quien mejor interpreta el librillo de Setién. Perdió más de un balón, pero recuperó decenas y aportó además juego entre líneas. El gol de Griezmann germinó de sus botas. La peor noticia es que no estará en la vuelta en el Camp Nou al haber visto una amarilla y cumplir ciclo de sanción.

Rakitic: Seguimos sin entender la obsesión de Setién de poner a un jugador que está a años luz de su mejor nivel. Mediocre en todas las facetas del juego, con el balón en los pies fue una auténtica agonía. Fue el primer cambio de Setién, en el minuto 55. Dos minutos después llegaba el gol del Barça.

De Jong: Mal partido del holandés, escogiendo siempre la peor opción. Si quiere aspirar a ganar la Champions, ha de espabilar… y mucho.

Arturo Vidal: El mejor socio de Messi en el campo. Y decir esto del chileno es un reconocimiento a su juego y un palo a Setién, que no sabe acompañar a su mejor jugador de socios válidos y referenciales. Su testiculina es positiva por la capacidad de empujar al campo pero cuando se le funden los fusibles se mete en fregados que no tocan. Su intento de cabezazo a Mario Rui le costó la expulsión.

Messi: Está más solo que la una. Hizo la guerra por su cuenta, aunque no siempre le salió bien. Al argentino se le vio agobiado, tanto por la telaraña defensiva del Nápoles, como por la poca eficacia de sus compañeros. No pudo brillar en casa de Maradona, pero era el único en el campo que era capaz de silenciar San Paolo él solito.

Griezmann: Está empezando a coger fama de abrelatas. No en vano ha abierto el marcador en un total de ocho partidos. Con estos números está justificando de sobras su fichaje. Y eso que en el juego sigue demostrando una irregularidad preocupante, pero a nivel de números su rendimiento está siendo incontestable.

CAMBIOS:

Arthur: El brasileño dio sentido y criterio en el juego.

Ansu Fati: Apenas pudo participar al entrar en los últimos minutos.