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LEGANÉS

El infortunio corta la regularidad de Cuéllar en el Leganés

En sus dos primeras temporadas como pepinero sólo se había perdido dos partidos por lesión y sanción. Su última lesión elevará a once los duelos ausente en esta temporada.

Actualizado a
El guardameta español del Leganés, Iván Cuéllar, durante un entrenamiento.
Chema DíazDiario AS

La mala suerte de las lesiones se ha vuelto a cebar con Iván, el 'Pichu', Cuéllar. El portero del Leganés, cuarto capitán del equipo, no podrá estar frente al Betis el domingo (14:00) en Butarque por culpa de una lesión muscular en el soleo que amenaza con dejarle fuera durante dos-tres semanas. Es el tercer problema físico que sufre el portero en esta temporada en la que le ha abandonado la suerte que lo blindó al sur de la capital. Pichu apenas se había lesionad hasta el vigente curso, en el que ha tenido problemas de toda índole.

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El tiempo estimado de baja le impedirá, en el mejor de los casos, estar entre los palos dos partidos más, sumando, así, once jornadas en total en las que no ha podido competir, bien por sanción, bien por lesión. Su periodo de ausencia más largo desde que está en el Leganés.

En su primera campaña en la Avenida de los Once Leones lo jugó todo en el torneo de la regularidad menos los dos últimos partidos por decisión técnica. Garitano premio a Champagne una vez cerrada la salvación. El curso pasado sólo se perdió sólo cuatro partidos de Liga: uno por lesión, otro por sanción y dos por decisión técnica.

Un portero diésel

Esta lesión es la tercera que dejará KO a Cuéllar en lo que llevamos de curso. La primera fue un problema de espalda que, en la segunda jornada, le impidió jugar frente al Atlético de Madrid Fue baja sólo un puñado de días. Después vino el asunto más grave. El portero sufrió un absceso amebiano en el hígado, asunto grave que le hizo perder varios kilos y que, de haberse localizado en otros órganos, podría haber puesto en riesgo su carrera. Poca broma. En total se ausentó 46 días que, traducido en partidos, supuso su baja durante seis jornadas.

Regresó contra el Mallorca en el primer triunfo del Lega esta temporada (1-0) y la primera vez que los pepineros dejaban a cero su portería. Su presencia fue luego importante en la recuperación de un equipo que fue remontando el vuelo espoleado por Javier Aguirre, pero también por la suma de liderazgos de un vestuario en el que él, Pichu, es referencia.

Regularidad que le fue permitiendo recuperar su mejor versión. En el vestuario lo definen como un arquero 'diésel', que necesita tiempo para reencontrarse. Y en ésas andaba cuando, ante el Atlético de Madrid, hace dos jornadas, acabó expulsado por doble amarilla. La sanción se agravó por la trifulca posterior. Dos partidos sin jugar que iban a cortarse ante el Betis. Esta nueva lesión lo ha impedido.