El 4-1-4-1: el sistema perico en los duelos de máxima exigencia
Rubi ya lo utilizó en el Bernabéu y en el Espanyol-Barcelona, aunque no dio los mejores resultados. Hernán, Melendo y Sergio disputarían una plaza.
Solamente el lunes por la tarde, en una sesión en la que únicamente participaron nueve jugadores del primer equipo, el cuerpo técnico decidió abrir la puerta a la prensa y a los aficionados. Rubi ha decidido blindar al equipo para preparar meticulosamente y con tranquilidad el derbi. Aunque cada vez más los equipos no guardan secretos por el análisis de vídeo y el scouting, nadie quiere dar pistas y aún se busca el factor sorpresa.
Rivales como Barcelona y Real Madrid condicionan, y en estos encuentros el equipo ha tenido un comportamiento diferente. En los dos encuentros de la primera vuelta ante Real Madrid (1-0) y Barcelona (0-4), el equipo perico jugó con un sistema 4-1-4-1, con Borja Iglesias descolgado, dos jugadores de banda que hiciera un mayor trabajo defensivo y dos interiores por delante de Marc Roca, que hacía de ancla y de ayuda para frenar a Leo Messi en el encuentro ante el equipo azulgrana. Un sistema que podría repetirse en el Camp Nou teniendo en cuenta que el Espanyol puede presionar en campo rival o defenderse cerca de su área, pero nunca quedarse a mitad de camino.
Con estos condicionantes, y con una defensa formada en la que únicamente se presenta la duda de Roberto Rosales o Javi López (quien jugó la ida), el mediocampo y la delantera es donde las piezas pueden bailar más. Marc Roca, Esteban Granero y Víctor Sánchez podría actuar en mediocampo, mientras que Borja Iglesias será el delantero. Las bandas son las incógnitas, aunque Wu Lei también será titular teniendo en cuenta sus características y los antecedentes. Por lo tanto la plaza que queda la podría ocupar Óscar Melendo, Sergio García o Hernán Pérez. La pieza de un puzzle que espera ganar diez años después.