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LAS PALMAS

Los ex consejeros avalan la llegada de Pepe Mel

Un ex presidente y dos ex vicepresidentes de Las Palmas entienden como lógico el cambio de entrenador para intentar lograr 'el milagro'.

Los ex consejeros avalan la llegada de Pepe Mel

El ex presidente Luis Sicilia y los ex vicepresidentes José Luis Cárdenes y Rafael León entienden que hacía falta un cambio de entrenador, puesto que con Paco Herrera no se lograba mejorar, esperando que con Pepe Mel al mando se logre el 'milagro' en las 14 jornadas que quedan por disputarse.

Sicilia vio en la rueda de prensa de Mel "palabras esperanzadoras y un mensaje lleno de optimismo", aunque "luego ya veremos lo que pasa cuando el balón empiece a rodar", pero entiende que "las palabras se acaban cuando las cosas no han salido y hacía falta sabia nueva con un cambio de entrenador", porque "Paco Herrera era el reflejo de lo que veíamos en el campo; era un hombre tocado". Con el nuevo míster "psicológicamente tocas algo en la cabeza de los jugadores y las cosas pueden cambiar; eso es lo que todos deseamos".

Del madrileño dijo que se trata de un entrenador "experimentado que no solo habla con conocimiento de causa, sino que ha logrado varios ascensos y eso da bastante prestigio", Que firme solo por 14 partidos "es un mensaje estratégico que tiene que ayudar al grupo porque les dice que viene aquí a sacar esto adelante y no a pensar en más adelante; me parece bien". Lo que ve es que en la actual plantilla "los jugadores no son especialmente veloces y tenemos que meter una machar más para poder cambiar esta dinámica".

Lo que tiene claro es que "hay que parar como sea esta hemorragia de 7 entrenadores en temporada y media. Es evidente que cuando a los jugadores no se les saca potencial las cosas no se hacen mal de una y otra parte. Mel es el único clavo ardiendo que nos queda porque de lo contrario la temporada se nos haría muy larga".

Cárdenes, por su parte, entiende que "Paco Herrera dijo lo mismo que Mel y él también ascendió a equipos a Primera… El fracaso no es de los entrenadores sino de una plantilla que no está equilibrada; lo va a tener muy difícil", argumentó de entrada.

Para él, Mel "sabe que si lo hace bien o se nota un cambio en el equipo lo lógico sería que se le invite planificar temporada que viene, incluso aunque no se subiera, por lo que él también se juega mucho. Está casi imposible poder llegar al playoff y casi tenemos que empezar a pensar en la próxima temporada puesto que nosotros los tendríamos que ganar casi todo y el resto fallar, algo que es muy difícil porque no creo que seamos capaces de ganar tanto. Uno de los problemas ha sido tener a tantos jugadores veteranos, porque esto parece un cementerio de elefantes. Se ha demostrado que eso es un problema porque no corremos y luchamos como lo hacen otros. De aquí para atrás no se ha visto mucha ilusión en lo que se hacía y parecía que se jugaba para ver si sonaba la flauta. No se juega con balón y muchos se quedan mirando a lo que hace compañero cuando no tienen la pelota en los pies. Aunque el rendimiento no es el esperado por todos, sería importante que la afición empuje al equipo en los partidos que quedan", recomendó.

León, por su parte, "la ilusión es poca a pesar del nuevo entrenador porque con los pies en la tierra es casi imposible. Si seguimos como hasta ahora no habrá forma humana de intentar ganar un partido fuera. Mel llega en un momento crítico y si gana en A Coruña igual se coge una moral terrible y las cosas pueden cambiar. También digo que si perdemos las probabilidades serían realmente remotas y si no se gana en pocas semanas estaríamos pensando más en el futuro que en el presente", detalló

Es de los que opina que "hacía falta un cambio, lo veía todo el mundo. Se hizo tarde y se estuvo esperando mucho tiempo para ver si pasaba algo. Existe un componente mental que hace que jugadores no rindan. Los jugadores pueden dar más que lo que están dando, pero se les ve bloqueados. Los rivales corren a comerse balón y los de Las Palmas lo juegan y no se comen el campo. Pasa algo, como la autoexpulsión de Cala, que se le vio un desquiciamiento por no lograr lo que todos buscábamos".