NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

REAL MADRID

Solo Del Bosque cumplió su contrato en la era Florentino

Diez de los doce entrenadores de su mandato se marcharon antes de que venciese su vínculo con el club. La excepción es López Caro, que coincidió con la dimisión del presidente.

Actualizado a
Del Bosque, en su etapa como entrenador del Real Madrid, conversa con Zinedine Zidane.
DIARIO ASFELIPE SEVILLANO

Julen Lopetegui ha corrido la misma suerte que diez de los doce entrenadores que han dirigido al Real Madrid con Florentino Pérez en la presidencia. El ex seleccionador tampoco ha completado los tres años que firmó y, de hecho, solo Vicente del Bosque terminó su etapa en el club cuando lo marcaba su contrato. La excepción es López Caro, que ocupó el banquillo del Santiago Bernabéu en la temporada en la que Florentino anunció su dimisión.

Del Bosque dirigió tres años y medio de éxitos en la capital. Con él, el Real Madrid ganó dos Champions, dos Ligas, una Supercopa de España, una de Europa y una Intercontinental. Sin embargo, en verano de 2003, la directiva decidió no prorrogar su contrato y firmar a Carlos Queiroz. Eso sí, a día de hoy, el técnico charro es el único que puede presumir de permanecer en el cargo hasta la fecha marcada.

Queiroz llegó como una apuesta de Florentino tras el adiós de Del Bosque. Firmó dos años, pero solo cumplió uno de ellos. El presidente del Real Madrid fue muy crítico con el portugués: "Fue un error y nos ha decepcionado porque no ha cumplido con los objetivos marcados, la administración y motivación de la cantera, y con un equipo apoderado del desorden y la falta de autoridad". Su sustituto fue Camacho.

La historia del técnico murciano se cerró con su dimisión. Camacho vinculó dos temporadas su relación con el Real Madrid, pero tras un mes en el cargo decidió marcharse. Fue en septiembre de 2004 y tras perder dos partidos. Años después explicó lo sucedido en una entrevista para El Confidencial. "Fui yo quien decidió marcharse (...) No había una planificación deportiva para llevar a cabo los proyectos que pretendía el presidente. Contratar a una megaestrella por temporada fue un error del señor Pérez", sentenció.

Tras el inesperado contratiempo, Florentino Pérez anunció a Mariano García Remón, segundo de Camacho. El presidente madridista recalcó que no se quedaría "de forma transitoria" y que era uno de los técnicos que se había sondeado en el verano de Queiroz. Nada más lejos de la realidad, García Remón fue destituido en el mes de diciembre de 2004.

Con dos entrenadores 'express', se firmó a Vanderlei Luxemburgo con el fin de que se asentara en la butaca del Bernabéu. Llegado a mitad de temporada, el club se comprometió a cederle los mandos de la plantilla hasta el final de la temporada 2005/06. Tampoco sucedió. Cansado de los malos resultados, un Florentino al límite decidió despedirle en diciembre de 2005.

Es entonces cuando llega López Caro de forma interina. Sería el último entrenador de Florentino en su primera etapa al mando del Real Madrid. Sí que acabó la temporada, antes de la llegada de Fabio Capello. El que no lo hizo fue el presidente, que presentó su dimisión en febrero: "Creemos que el Real Madrid necesita un cambio. Este es el momento adecuado para que deje la presidencia. Estoy convencido de que puede ser el revulsivo que el club necesita".

El 1 de junio de 2009, Florentino fue investido, de nuevo, presidente del club. Con fichajes galácticos como Cristiano Ronaldo y Kaká, el Real Madrid necesitaba un entrenador a la altura del proyecto. Se apostó por Manuel Pellegrini a base de talonario: se pagaron los cuatro millones de su cláusula y se le firmó por dos años. La decepcionante eliminación en Copa contra el Alcorcón y sus cero títulos terminaron con la paciencia de la directiva. Acabó la temporada, pero no cumplió su contrato.

El siguiente, José Mourinho. El técnico portugués estuvo tres temporadas en la entidad madridista hasta que Florentino y él decidieron finalizar, en 2013, la relación contractual por los problemas con el vestuario. Fue de mutuo acuerdo y sin indemnizaciones de por medio. Tenía contrato hasta 2016.

Florentino decidió entonces dar un giro completo al estilo de entrenador que llevaba tres años gobernando en el equipo. Firmó a Carlo Ancelotti por tres temporadas, logrando la ansiada 'Décima'. Una temporada en blanco le condenó. En 2015 fue despedido, a pesar de que aún le restaba un año de contrato.

El de Rafa Benítez también fue un proyecto frustrado. De los tres años firmados en verano de 2015 apenas completó medio. Zinedine Zidane le reemplazó y coronó al Real Madrid como mejor equipo de Europa tres temporadas consecutivas. Sin embargo, la presión del puesto llevó al técnico francés a renunciar al cargo con aún dos temporadas de contrato, ante la sorpresa de todos, incluido el propio Florentino. 

Tras mucha rumorología, la directiva decidió apostar por el que hasta entonces era el seleccionador nacional: Julen Lopetegui. Sus primeros días como técnico del Real Madrid fueron convulsos: Rubiales no le perdonó su negociación en la previa del Mundial y le destituyó de su cargo. Aún así, el técnico vasco mostró su felicidad plena en su presentación: "Ayer fue, desde la muerte de mi madre, mi día más triste. Pero hoy es el día más feliz de mi vida".

Aquella historia, con fecha de cierre estipulada en junio de 2021, finalizó este lunes. La de Solari tampoco parece que se vaya a prorrogar en exceso. ¿Terminará el próximo entrenador su contrato en la Casa Blanca? Solo el tiempo lo dirá...