NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

MUNDIAL 2018 | RUSIA

The Telegraph: Cheryshev, investigado por presunto dopaje

El padre del atacante del Valencia contó en una entrevista que se le inyectó una hormona del crecimiento poco antes del Mundial de Rusia.

Cheryshev celebra un gol durante el pasado Mundial.
OZAN KOSEAFP

El jugador del Valencia Denis Cheryshev está siendo investigado, según The Telegraph, por una agencia antidopaje española a raíz de una entrevista en la que el padre de jugador afirmó que se le estaba administrando una hormona del crecimiento. El futbolista, según las declaraciones de su padre, habría sido obligado a tomar las sustancias ilegales bajo la amenaza de no ser convocado para jugar el Mundial si no accedía.

La Federación Rusa (RFU), por otra parte, ha anunciado que el tratamiento que recibió Cheryshev fue una inyección de plasma "perfectamente legal" y ha acusado al periodista que entrevistó al padre del jugador ruso de malinterpretar las palabras del entrevistado. Sport Weekend, el diario que entrevistó al padre de Cheryshev, reconoce que el entrevistado pronunció las palabras "hormona de crecimiento" pero matiza que pudo referirse a "factores de crecimiento", otra forma de llamar a las inyecciones de plasma.

La vicedirectora de la Agencia Antidopaje Rusa, Margarita Pakhnotskaya, informó la semana pasada de que entrevistó a Cheryshev y a su padre después del Mundial y envió posteriormente un informe de la reunión a la Agencia Española de Protección de la Salud y a la Agencia Antidopaje Mundial. Aunque la presunta administración de hormonas del crecimiento se habría producido durante sus últimos meses en el Villarreal, ninguna de las agencias antidopaje tienen pruebas médicas del jugador recogidas durante este período.

El uso de hormonas de crecimiento por cuestiones médicas no es un delito antidopaje pero, si se demuestra que no hay ninguna justificación médica, el jugador podría ser sancionado con hasta cuatro años sin jugar.