El Espanyol afrontará el derbi lanzado y en el ansiado 'Top-10'
Encadenan nueve jornadas sin perder y ya se sitúan novenos. El éxito es colectivo: funcionan el bloque, los cambios, muchos jugadores fuera de su posición y la implicación de toda la plantilla.
Con Diego López empieza todo. Su récord de imbatibilidad, 586 minutos, resulta la punta del iceberg de un Espanyol que llega lanzado a una de las citas más ansiadas por su afición: el derbi del próximo domingo en el Camp Nou. Después de nueve jornadas sin perder (más el partido de Copa), el equipo al fin accede al Top-10 que se marcó como objetivo (es noveno) y aúpa la mirada hacia Europa. Pero, sobre todo, demuestra que no tiene límites. Porque no es el éxito de una individualidad, ni de varias, sino del colectivo.
Aunque con el paso de las jornadas Quique Sánchez Flores ha ido dando con un presumible once de gala, la victoria del domingo ante el Sporting reafirmó una vez más que no sólo rinden los teóricos titulares, sino toda la plantilla. Y que lo hacen casi en cualquier posición. El lateral derecho, Víctor Sánchez, y uno de los centrales, David López, son mediocentros. José Manuel Jurado se iba a desempeñar por la izquierda, o en mediapunta, pero ha encontrado un brillante acomodo en el doble pivote.
Leo Baptistao se muestra efectivo en la banda si lo requiere el sistema, como en el Calderón, o en ausencia de Pablo Piatti, hasta el punto de que la lesión de éste (autor de cinco goles y siete asistencias) no merme en demasía el rendimiento del equipo. Incluso se recuperan para la causa, y a un nivel de brega correcto, Felipe Caicedo y Álvaro Vázquez. Lo mismo sucede con Pape Diop.
Mención aparte merece Gerard Moreno: es punta, 'trescuartista' o un aguerrido defensor más, en función del momento del partido... Y el fondo de armario también responde: la lista no cabe en unas líneas. Los pericos vuelan alto, en bandada. Y así, no habrá rival que se les pueda resistir.
