Carrasco y su juego han convencido al Cholo Simeone
El Atlético de Madrid lo fichó porque puede jugar en un 4-3-3 y en un 4-4-2. Tiago, Gabi y Koke son fijos y le ha ganado el puesto a Óliver y Saúl.
El Atlético fichó a Carrasco porque es un jugador que puede jugar en un sistema de 4-3-3 y también en otro de 4-4-2. Esa polivalencia para adaptarse a varios dibujos es lo que hizo decantarse a la dirección deportiva del club madrileño. Eso y la calidad que atesora el belga. Carrasco llegó al Atlético un poco a la sombra de fichajes a bombo y platillo como los de Jackson o Vietto y también de Óliver, repescado tras un año de buen rendimiento en el Oporto.
Casi tres meses después, el exterior está empezando a demostrar que puede ser un jugador determinante para el equipo. Al futbolista le costó entrar en el once y, de hecho, no convenció mucho a Simeone en la pretemporada, donde apenas tuvo destellos de su categoría. El Cholo tenía la difícil misión de ir encajando las piezas y Carrasco tenía todas las papeletas para desempeñar el papel de jugador para utilizar a la contra, en encuentros con el rival volcado sobre la portería rojiblanca.
Algo de eso sucedió en su debut, el 30 de agosto en el Sánchez Pizjuán, cuando el Atlético ya iba ganando. Pero mostró muy buenas maneras en los veinte minutos que estuvo en el terreno de juego. Retuvo la pelota y estuvo muy participativo en las contras rojiblancos. Luego jugó ante Barcelona y Getafe, pero su punto de inflexión llegó en el derbi ante el Real Madrid del pasado 4 de octubre. Con 0-1 al descanso, Carrasco, Jackson y Vietto revolucionaron el encuentro y lograron el empate, que hubiese sido un triunfo de no ser por Keylor Navas. Ese día Carrasco atacó una y otra vez a la defensa madridista y ésa es otra de las virtudes que gusta al cuerpo técnico: la de ir e ir a por el defensa sin desmayo. Insistir en el desborde. Y el Atlético no tiene muchos jugadores con esas características.
Tras el derbi, todo ha sido más fácil para el belga: jugó y marcó ante la Real Sociedad (en una gran jugada de contragolpe que propició Fernando Torres) y también tuvo un buen rendimiento ante el Astana en Champions. Su gran partido lo culminó el domingo ante el Valencia, en los 69 minutos que estuvo en el terreno de juego. En total ha jugado esta campaña siete encuentros, con 325 minutos jugados y dos tantos.
Tiago y Gabi parecen fijos en el doble pivote. El portugués está de diez y Gabi comienza a parecerse al de hace dos temporadas. A su lado, siempre que encuentre su nivel de juego, estará Koke, por lo que queda un puesto en esa línea medular. Y Carrasco le ha ido ganando la partida a futbolistas como Óliver y Saúl. El Cholo ha colocado en ese puesto de interior derecho a Correa, aunque da la sensación de que el argentino rinde mejor más cerca del área. A ellos les ha ido ganando el sitio Carrasco. Y se ha ganado también a la afición rojiblanca. Un chico sencillo, con hambre y con ganas de comerse el mundo. Carrasco ha propiciado que ya nadie se acuerde de Arda.
Propiedad sólo del Atlético
El Atlético le hizo un contrato a Carrasco por cinco temporadas y el pase del jugador es propiedad en su totalidad del club madrileño. El coste de la operación fue de 15 millones de euros más variables. El Mónaco, eso sí, se guarda el 25 por ciento de un futuro traspaso del centrocampista rojiblanco. En el Atlético creen que el jugador puede rendir mucho más a lo largo de la temporada.