El lado bueno de las cosas

"Soy el señor Lobo, soluciono problemas". Así se presentaba uno de los personajes de Tarantino en la sublime Pulp Fiction, con el que ayer un periodista equiparaba a Javier Aguirre en la comparecencia del técnico perico. Éste, pese a haber resucitado al Espanyol, cual Travolta inyectando adrenalina sobre el corazón de Uma Thurman, se decantó por recomendar otra película: El lado bueno de las cosas. Prefiere el mexicano otro tipo de inyección, la de positivismo, que guarda mucha relación con su propia trayectoria y la de Miroslav Djukic, con los caminos de Espanyol y Valladolid, que hoy se enfrentan en Cornellà-El Prat animosos y con la intención de acariciar la permanencia -sino matemáticamente, sí sentimentalmente- en caso de victoria.

La clasificación da, desde luego, para ver el vaso medio lleno. En el caso del Espanyol, suma 31 puntos y viene de perder en el Calderón, pero su lado bueno de las cosas es que acumula cinco victorias consecutivas en casa y que hasta el 1-0 contra el Atlético había enlazado seis jornadas sin perder. A la inversa le sucede al Valladolid, que tras cuatro jornadas sin ganar lo hizo hace siete días en Vallecas (1-2). Los 33 puntos de los pucelanos también dan para confiar en la permanencia. Y, en ambas situaciones, para soñar aún con Europa si ganan, para apostar a doble o nada por la ambición como hacía Robert de Niro con sus Philadelphia Eagles en esa comedia que tanto aprecia Aguirre.

El técnico del Espanyol deberá recomponer parte de su equipo. Sin Stuani, sancionado, llega que ni pintado el retorno del indisciplinado Wakaso. Y sin Forlín, aquejado de un proceso febril, la carta será Raúl Rodríguez, que ya rindió en el mediocentro ante el Betis. Más optimista aún puede ser Djukic, quien repetirá la alineación que derrotó al Rayo, con Bueno (el apellido más adecuado para este lado de las cosas) y Manucho en la punta de ataque.

El tercer actor del partido será la afición. La querencia del perico por el horario de domingo a las cinco de la tarde es innegable, y a Cornellà-El Prat se le había negado desde abril de 2011. Espanyol-Valladolid con aroma, pues, a fútbol clásico. Ya solo falta que nadie tropiece como le sucedió a Jennifer Lawrence al recoger su Oscar, obviamente, por El lado bueno de las cosas. Excelsior.

Casilla y Dani Hernández: porteros protagonistas

Dos aspectos tienen en común Kiko Casilla y Dani Hernández: son los guardametas titulares de Espanyol y Valladolid, respectivamente, y ambos cumplirán en el partido de hoy efemérides. En el caso del guardameta catalán, se reencontrará con el equipo contra el que debutó en Primera División, lo cual sucedió el 20 de enero de 2008 en el Nuevo Zorrilla. Casilla tuvo que entrar en el minuto 47, por la lesión de Iñaki Lafuente (Carlos Kameni, portero titular, estaba en la Copa de África). En el caso de Dani Hernández, hoy cumplirá una vuelta entera de Liga como portero titular del Valladolid, 19 partidos, desde que Miroslav Djukic le dio la alternativa contra el Málaga.