Más sombras que luces en el regreso a Primera

La derrota ante el Betis ha sido la primera lección de la temporada para el Granada. Sin necesidad de dramatizar y más allá del resultado, el juego que ofreció el cuadro de Fabri está lejos del necesario para ser competitivos en Primera. El Granada se mostró sin ritmo, muy estirado, sin capacidad para jugar de forma colectiva y tampoco aparecieron las individualidades. El Betis fue mejor y ganó aunque el empate estuvo cerca. Faltan tres jugadores importantes por llegar y otros lo acaban de hacer a un Granada en plena fase de construcción.

Los primeros problemas aparecieron en defensa, fundamentalmente tras la defectuosa actuación de Noe Pamarot, impreciso durante la primera parte. Pudo ser expulsado. Mainz y Nyom apagaron constantemente los fuegos provocados por el francés. El Granada no estuvo cómodo con la pelota, ni siquiera con la entrada de Martins y Yebda en la segunda parte. Ni siquiera se cerró bien en defensa y el Betis siempre encontró espacios.

Las grandes dudas están en el ataque. La llegada de Diakhaté subirá el nivel defensivo y las múltiples alternativas en la parcela ancha ofrecen garantías, pero en ataque hay mucho que hacer. La delantera ha empezado esta temporada igual que acabó la anterior: con Geijo lesionado e Ighalo como única alternativa. El nigeriano parece lejos de ser competitivo en Primera y Geijo no estará hasta final de septiembre. Cordero aún no ha mejorado la parte más débil de la plantilla. O llegan refuerzos o anotar un gol será una raya en el agua.