Ischia: "Para mí, se trata de un despido"

Tras la eliminación del equipo boquense en la Copa Libertadores, el presidente del club, Jorge Ameal, dijo a la prensa que "hubo un acuerdo" entre la directiva e Ischia, y que éste dejará su cargo cuando finalice el torneo Clausura 2009, en julio.

"Para mí, se trata de un despido. Una persona que renuncia no sigue trabajando. El sábado pasado, estuve en el hotel con el presidente (Ameal) y el domingo con dos dirigentes. Me pidieron que me alejara y les dije que no", comentó el técnico en una rueda de prensa.

"Me dijeron que terminaba este torneo y que, después, buscarían entrenador. No estoy de acuerdo con mi salida pero entiendo el momento. Yo todavía no firmé la rescisión", dijo Ischia. El documento de rescisión "me lo entregaron ayer pero no estaba bien (redactado). Recién cuando sea el correcto veremos cómo terminamos. Para mí es despido. Ellos hablaron de común acuerdo", señaló.

En cuanto a la posibilidad de que sea el director deportivo del club, Carlos Bianchi, quien le suceda en el cargo, Ischia dijo: "Cuando llegué al club a principios de 2008, dije que iba a ser feliz si él estaba cerca del Boca Juniors". "Soy uno de los que más quiere que él se acerque (al cargo de entrenador). Se lo dije, pero es decisión de él; yo estaría feliz si fuese él quien siguiera mis pasos", aseguró.

"Hablé con Bianchi el martes pero la decisión (de ser el nuevo entrenador del equipo) pasa solamente por él. Ningún directivo me dijo que hablara con él", indicó. La directiva del Boca Juniors dejó en manos de Ameal las gestiones para convencer a Bianchi de que acepte el cargo de técnico al entender que son los hinchas, según las encuestas publicadas en los últimos días, los que quieren que sea el técnico del equipo quien en esa función logró nueve títulos entre 1998 y 2003.

Bianchi ha rechazado la posibilidad de volver al banquillo boquense porque quiere cumplir con una cláusula en el contrato que le liga al Boca Juniors que él mismo impuso y que le impide ser el sucesor de su amigo Ischia. La alternativa de que otro entrenador asuma el cargo hasta diciembre de este año para que Bianchi quede liberado de ese compromiso de cara a 2010, ha pasado a un segundo plano, ya que los dirigentes pretenden insistir "hasta donde se pueda" con la posibilidad del regreso de éste al cargo en el que logró un récord en el club auriazul.

Además, por razones económicas, la directiva cree que el pago de 1,7 millones de dólares que recibe anualmente Bianchi por la función que cumple desde enero daría un respiro a su tesorería si de una oficina pasara al banquillo.