El Liverpool dio ayer su consentimiento para que el delantero Robbie Keane regrese al Tottenham coincidiendo con la última jornada del mercado invernal de fichajes en Inglaterra (se había prorrogado un día). Ambas directivas mostraron su preocupación por no cerrar a tiempo esta contratación debido a los problemas generados por las malas condiciones meteorológicas. Sin embargo, la transferencia quedó realizada.

La de Robbie Keane, delantero irlandés, no ha sido una buena operación para el Liverpool, que pagó por él hace sólo seis meses 22 millones de euros el Tottenham y que se lo ha devuelto por 16,7. El delantero no terminaba de funcionar en los reds y Benítez lo había dejado en la grada en varias ocasiones. Ahora, con la venta, el Liverpool ha perdido casi cinco millones con respecto a la inversión que realizó.

El delantero dio explicaciones ayer por lo sucedido: "Fue muy difícil para mi dejar el Tottenham en verano. Ahora se ha probado que el Liverpool no era solución para mí. Algunos aficionados del Tottenham pensarán que los abandoné, pero les puedo asegurar que voy a dar lo mejor de mí mismo en esta segunda oportunidad que se me concede".