SALUD

El AOVE, relacionado con la prevención del cáncer colorrectal

Una investigación de la Universidad de Jaen concluye que, a diferencia del aceite de girasol o el aceite de coco, el aceite de oliva virgen extra provoca un cambio en la flora bacteriana intestinal beneficioso.

as.com

Una nuevo estudio de investigadores de la Universidad de Jaen concluye que las dietas ricas en aceite de oliva virgen extra causan un cambio en la flora bacteriana intestinal que se relaciona con la prevención del cáncer colorrectal, a diferencia de lo que ocurre con el efecto en la microbiota del aceite de girasol y aceite de coco, que generan un microambiente intestinal proinflamatorio, factor de riesgo para desarrollar la enfermedad.

El trabajo, publicado en la revista 'Nutrients', trataba de arrojar luz en el actual contexto de expansión de dietas excesivamente ricas en grasa en el mundo occidental. "Depende de las características concretas de cada país, pero aceites como el de girasol o incluso el aceite de coco, están ganando adeptos. Por ello, quisimos comparar esos dos aceites también provenientes de grasas vegetales con el aceite de oliva virgen extra", señala José Juan Gaforio, catedrático de Inmunología de la UJA y principal responsable de la investigación.

"Científicamente hay evidencias de que ciertas bacterias intestinales que conforman la microbiota intestinal, en función de su aumento o disminución, son capaces de prevenir o incentivar el cáncer colorrectal. El cáncer no aparece por un solo evento sino por la influencia de un conjunto de varios eventos. En este estudio en concreto analizamos si en el intestino de los ratones se produce un ambiente antiinflamatorio o proinflamatorio, según aumenten o disminuyen una serie de bacterias", añade el investigador que realizó un análisis comparativo del efecto de tres dietas altas en grasa diferentes, basadas en AOVE, aceite de girasol y aceite de coco.

Microambiente antiinflamatorio

Así, los resultados del estudio muestran que todas las dietas utilizadas produjeron una disbiosis, es decir, un desequilibrio microbiano que reduce la riqueza y diversidad de la microbiota intestinal. "En concreto, a partir de la dieta rica en AOVE se produjo un cambio en la flora bacteriana intestinal asociado a un microambiente antiinflamatorio, caracterizado por la disminución de las bacterias Enterococcus, Staphylococcus, Neisseria y Pseudomonas, el aumento de la relación Firmicutes / Bacteroidetes y el mantenimiento de la población de Akkermansia. En ese sentido, ese efecto supone un factor protector para que no se desarrolle cáncer colorrectal", explica Gaforío, que contó con la colaboración de los investigadores de la UJA Cristina Sánchez, Carmen Rodríguez e Ignacio Algarra.

"Esta investigación vuelve a corroborar que el aceite de oliva virgen extra es un aceite saludable. Es importante además porque el AOVE se confirma como más saludable para la flora bacteriana intestinal que los otros dos tipos con los que se ha comparado, el aceite de girasol y el aceite de coco, sobre el que no hay ninguna evidencia científica de su efecto saludable en dietas alimentarias", concluye José Juan Gaforio.