NUTRICIÓN

Autofagia, la dieta que sigue Javier Cansado

El cómico presume de mantener un sistema de alimentación con un límite horario basado en las investigaciones del premio Nobel de Medicina Yoshinori Ohsumi.

Cuando Javier Cansado acudió a 'La Resistencia' sorprendió a David Broncano antes de que llegara la traca de preguntas final. Ante la sorpresa del presentador le reveló que practica la autofagia, un sistema de regulación adaptado al regimen de comidas que le permite verse en buen estado. Y aunque el cómico carabanchelero no fue capaz de recordar bien el nombre de su inspirador (se trata del premio Nobel de Medicina de 2016: el japonés Yoshinori Ohsumi), consiguió trasladar una idea de lo que supone.

Las investigaciones del científico nipón han descubierto que algunas células se deshacen de las proteínas dañadas y de orgánulos (estructuras en el citoplasma de cada célula). Lo lisosomas transforman la 'basura proteica' en aminoácidos para crear nuevas células. Esto se ha revelado como un buen camino para acabar con infecciones e inflamaciones, ya que acaban con virus y bacterias.

La autofagia también ha servido para que algunos intenten improvisar una dieta basada en estos principios. "La autofagia se activa (más aún si entrenamos en ayunas) reciclando mitocondrias, orgánulos y proteínas disfuncionales siendo reutilizados como alimento. La falta de autofagia se asocia con multitud de patologías por acúmulo de 'basura biológica'", explica en su blog la dietista-nutricionista Marta Mató Hereu.

Adaptaciones de la autofagia

Se apuesta por el ayuno, la restricción de carbohidratos y el ejercicio de alta intensidad. Otros resumen su variante con un ayuno de un día para estimular la regeneración de las células. Otra versión consiste en saltarse el desayuno para favorecer el supuesto método de supervivencia. Javier Cansado, por su parte, aseguró que simplemente limitaba su ventana de comidas entre las 10 de la mañana y las 6 de la tarde para forzar esta situación.

Por el momento, este tipo de dieta no ha sido certificada por completo con estudios o investigaciones en humanos, pero se relaciona con los sistemas de ayuno intermitente. Lo que sí se ha comprobado es que hay ciertos indicios de que beneficia al organismo frente a enfermedades degenerativas como el alzhéimer o la demencia.