PSICOLOGÍA

Sacar, limpiar, tirar o donar: orden en casa, y en tu mente

Si al llegar a casa tras un día agotador encuentras todo ordenado, la sensación de bienestar aparece, pero si las cosas están por el medio y tienes que sacar tiempo para poner algo de orden, es muy probable que la ansiedad y el estrés comiencen a surgir.

Ikea

El orden es fundamental en muchos aspectos de la vida. Pero cuando nos referimos al orden en casa, es casi más importante. Cuanto más llenes tu casa, más cosas vas a olvidar que tienes. Y no vas a usar ni la mitad.

Por eso, antes de que lleguen las Navidades, y los Reyes Magos te inunden de regalos, deberías hacer limpieza: lo que no te pones, lo que no usas, lo que no te vale, lo que está roto... 'Antes de entrar, dejen salir' que dice la popular frase, y aplicado al orden, es también factible. Porque, además, una casa ordenada, es una mente ordenada.

Cómo el orden nos puede ayudar

"El ritmo acelerado de vida que llevamos provoca en muchos momentos no tener nuestro hogar ordenado y limpio como nos gustaría. A muchas personas les cuesta ponerse a limpiar y desde BISSELL facilitamos esa labor ya que sabemos que orden en el hogar ayuda a tener una buena salud mental y disfrutar más del día a día", explica Gerardo Montoiro, gerente de BISSELL España.

La gurú Marie Kondo, el feng shui o la filosofía zen se han convertido en métodos efectivos dentro de la revolución por el orden y lo sencillo: ordenar la casa de forma consciente y tranquila, quitando el polvo como si lo quitáramos de nuestra propia mente es el camino a la iluminación.

La finalidad está en cómo lo hacemos, abstraerse de cualquier otro pensamiento diferente a la tarea que estamos realizando, "hay que centrarse en el momento mindfulness que implica cada tarea de limpieza para estar en el aquí y ahora" explican desde BISSELL.

Guarda lo imprescindible y despeja el ambiente: "la naturaleza humana tiende a guardar y almacenar por lo que pueda pasar o si algún día lo necesitas, pero es un error frecuente. Por lo tanto, solo se guarda lo realmente necesario y que se usa de forma habitual. 'Menos es más' en todas las estancias de la casa, cuanto más despejado esté el ambiente, más libertad y tranquilidad", cuentan.

Sacar, limpiar, tirar o donar: "para ordenar correctamente hay que sacar todo lo que se posee y clasificar todos esos objetos. Haz varios grupos separando los que se vuelven a guardar, los que tiran y los que vas a donar. Es el momento idóneo para despedirte de aquello que lleva años guardados simplemente por apego", añaden.

Adiós desorden: "si al llegar a casa tras un día agotador encuentras todo ordenado, la sensación de bienestar aparece, pero si las cosas estás por el medio y tienes que sacar tiempo para poner algo de orden, es muy probable que la ansiedad y el estrés comiencen a surgir. El entorno refleja lo que sentimos, si hay orden, los pensamientos estarán en calma si vivimos con desorden, la mente estará alborotada.

Busca aliados: "la vivienda se debe limpiar frecuentemente, es normal que el polvo y la suciedad hagan acto de presencia y genere incomodidad en el ambiente. Está confirmado que un hogar limpio y ordenado logra que sus habitantes sean más felices y vivan en un ambiente más apacible". Una limpieza en grupo siempre es más rápida que individual.

"Es evidente que mantener la casa en orden supone un reto constante, pero con una buena organización y creando las rutinas necesarias, tu mente y tu casa estarán siempre bien ordenadas", concluye Montoiro.