SALUD MENTAL
Usar más de tres horas al día las redes sociales, asociado a depresión y ansiedad
Una investigación de la Escuela de Salud Pública Bloomberg de Johns Hopkins (EEUU) alerta de los peligros del uso prolongado de las redes sociales para la salud mental de los adolescentes.
El uso indiscriminado de las redes sociales tiene su lado oscuro. Puede que para muchos su irrupción sea la panacea pero lo cierto es que ha traído consigo no pocos problemas, que en muchos casos tienen consecuencias para la salud. Una nueva investigación a cargo de la Escuela de Salud Pública Bloomberg de Johns Hopkins (EEUU) concluye que los adolescentes que usan más de tres horas al día las redes sociales tienen más probabilidades sufrir problemas de ansiedad o depresión, en comparación con los adolescentes que no las usan.
En los últimos tiempos se viene hablando de la 'generación like'. Sus integrantes son jóvenes, nacidos a partir de 1994, que han crecido al amparo de las redes sociales y para los que el número de 'me gusta' o los 'followers' son el centro de su universo otorgándole al mundo digital más importancia incluso que al real. Lo que obviamente provoca adicción y, como comparte el estudio norteamericano, la posibilidad de sufrir problemas de salud mental si no se hace un uso adecuado.
El trabajo de los investigadores, publicado la revista 'JAMA Psychiatry', tenía como objetivo medir el tiempo que los adolescentes usan las redes sociales y examinar la posibilidad de desarrollar dos tipos de comportamientos que pueden ser indicadores de problemas de salud mental: internalización y externalización. El primero puede implicar retraimiento social, dificultad para lidiar con la ansiedad o la depresión o dirigir los sentimientos hacia adentro, mientras que el segundo puede conllevar comportamientos conflictivos como la agresión.
Datos del estudio sobre adicción
Los investigadores utilizaron una muestra representativa a nivel nacional de adolescentes estadounidenses de 13 a 17 años, en total 6.595 encuestados, a los que se les realizó un seguimiento de tres años interesándose por el tiempo que pasaron en las redes sociales, así como preguntas relacionadas con los síntomas de problemas de salud mental. Estos son los resultados:
- Menos del 17 por ciento de los adolescentes no usaban las redes sociales.
- El 32% (2.082) informó haber empleado menos de 30 minutos.
- El 31% (2.000) usó las redes sociales entre 30 minutos y tres horas.
- El 12% (817) (12%) las utilizó de tres a seis horas.
- El 8% (571) sobrepasó las seis horas de uso por día.
- 611 encuestados (9%) informaron experimentar solo problemas de internalización.
- 885 (14%) informaron experimentar solo problemas de externalización.
- 1.169 (18%) informaron haber experimentado problemas internos y externos.
- 3.930 (59%) informaron no tener problemas o bajos.
"Las redes sociales tienen la capacidad de conectar a los adolescentes que pueden ser excluidos en su vida diaria. Necesitamos encontrar una mejor manera de equilibrar los beneficios de las redes sociales con posibles resultados negativos para la salud. Establecer límites razonables, mejorar el diseño de las plataformas de redes sociales y centrar las intervenciones en la alfabetización mediática son todas formas en que potencialmente podemos encontrar este equilibrio", concluye Kira Riehm, principal autora de la investigación.
Te recomendamos en Deporte y Vida
- DEPORTE Y SALUD Elvira Sastre a Jon Kortajarena: "Consumir responsablemente aporta calma mental"
- REPSOL ¿A qué hora debes poner el despertador para levantarte de buen humor? Descubre el secreto del sueño
- DEPORTE Y SALUD La lesión de Varane que le impedirá jugar la semifinal contra el Chelsea
- SALUD Y DEPORTE Rope Training: ¿en qué consiste y cuáles son sus beneficios?
- SALUD Espididol: ¿cómo actúa y en qué consisten sus beneficios?
- DEPORTE Y SALUD ¿Qué síntomas puede causar el citomegalovirus que contrajo Álvaro Morata?
Deporte y Vida top
-
SALUD
Las 8 señales que te avisan de un ataque al corazón un mes antes
-
NUTRICIÓN
Retención de líquidos: cómo detectarla y combatirla a nivel nutricional