NUTRICIÓN

Un pequeño gesto para mejorar tu alimentación que no depende de ti (exclusivamente)

La política de algunos supermercados de colocar cerca de la caja determinados productos a todas luces pocos saludables tiene una mayor incidencia en tus hábitos alimenticios de lo que cabría esperar.

as.com

Es un pequeño detalle que puede pasar desapercibido pero cuya incidencia en nuestra salud es mayor de lo que cabría pensar. La política de algunos supermercados de colocar cerca de la caja determinados productos a todas luces pocos saludables, como dulces, patatas fritas o chocolate, entre otros, tiene una incidencia sobre nuestra alimentación más evidente de lo que podría imaginarse.

Las prácticas de los comercios, como la exhibición de productos, el posicionamiento, las promociones y la fijación de precios, pueden influir en las elecciones que hacemos en las tiendas como demostró el resultado de una investigación de la Universidad de Cambridge, publicada en 'PLOS Medicine', que concluyó que los consumidores se llevaron a casa un 17 por ciento menos de paquetes pequeños de alimentos poco saludables como consecuencia de su retirada de las proximidades de las cajas.

Otro dato incluso más relevante que el anterior es el que habla de una reducción del 76 por ciento anual en las compras menos saludables, imprevistas y compulsivas, cuya finalidad era un consumo 'en camino'. Es decir, antes incluso de llegar al hogar.

Responsabilidad compartida

Obviamente, no puede atribuirse a los comercios toda la responsabilidad ya que la decisión y responsabilidad de la compra depende exclusivamente del consumidor, aunque es cierto que los supermercados y grandes superficies pueden aplicar políticas diferentes que nos ayuden a evitar determinados productos perjudiciales para la salud.

"Nuestros hallazgos sugieren que, al eliminar los dulces y las patatas fritas de la caja, los supermercados pueden tener una influencia positiva en los tipos de compras que realizan sus compradores. Esta sería una intervención relativamente simple con el potencial de fomentar una alimentación más saludable. Muchas de estas compras pueden haber sido adquiridas por impulso, por lo que, si el comprador no coge una barra de chocolate en la caja, puede ser una barra de chocolate menos que consume", concluye la doctora Katrine Ejlerskov, principal autora del estudio.