DÍA MUNDIAL

Dermatitis atópica: 8 consejos para convivir con esta enfermedad crónica

La dermatitis atópica es una de las enfermedades cutáneas más frecuentes que cursa con irritación, picor y escozor, se manifiesta en diferentes grados y puede mermar la calidad de vida de quien la padece.

as.com

Según la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP), el 50 por ciento de los casos de esta enfermedad cutánea se diagnostica durante el primer año de vida por lo que, en el Día Mundial de la Dermatitis Atópica, la institución aboga principalmente por la prevención a través del uso de cremas emolientes en bebés con predisposición genética para hidratar su piel y proteger la barrera cutánea de los posibles alérgenos.

Y es que la carga genética es uno de los principales factores que intervienen en la aparición de la enfermecdad ya que se estima que las posibilidades de que un niño la desarrolle se encuentran entre el 40 y el 80 por ciento en función de si solo la sufre uno de los progenitores o ambos. Aunque los factores ambientales, las alteraciones inmunológicas o la disfunción de la barrera epidérmica suelen explicar también su aparición.

El principal problema que presenta la enfermedad es que hay que aprender a convivir con ella, con sus diferentes grados y con sus molestos síntomas, entre los que destacan piel seca, irritación, picor y escozor, que pueden extenderse por diferentes partes del cuerpo (pliegues de brazos y piernas, cara, manos y pies) y llegar a ser especialmente molestos, hasta el punto de mermar la calidad de vida de quien los padece.

Y es que hay eccemas de fácil tratamiento mediante productos tópicos que mejoran la atopía, pero las atopías severas pueden llegar a cambian la vida porque se hacen visibles y el picor llega a ser insoportable cuando se produce algún brote, que incluso requiere el uso de corticiodes, además de las cremas emolientes.

8 consejos para convivir con la dermatitis atópica

1. En la medida de lo posible, evitar situaciones estresantes ya que el estrés libera sustancias inflamatorias que provocan que se potencie las dermatitis y empeora la situación.

2. Uso habitual de cremas emolientes que mantengan hidratada la piel en todo momento.

3. Se recomienda el uso de ropa de algodón o lino, tejidos adecuados para lidiar con la dermatitis atópica.

4. También es recomendable utilizar jabones no detergentes para la limpieza de la piel, con pH ácido o neutro.

5. Mantener la casa limpia de polvo y evitar un ambiente excesivamente seco también es buena idea.

6. Las temperaturas extremas suelen incidir en el empeoramiento de la afección.

7. Evitar duchas o baños prolongados (no más de 5 minutos con agua templada) y secar la piel con cuidado, suavemente y sin restregar.

8. Consultar con el dermatológo o especialista sobre la dieta es aconsejable puesto que algunos alimentos pueden empeorar la situación.