5 motivos para huir de las dietas milagro y 3 consejos para perder peso sin inventos

Si quieres dejar de perder tiempo y dinero, sigue leyendo. Y si lo que quieres es perder peso, sigue leyendo. No dejes de leer porque nos hemos propuesto abrirte los ojos sobre una realidad en la que expertos y estudios científicos coinciden: las dietas milagro no funcionan. Así de simple. Sigue leyendo.

Dieta Dukan, dieta Atkins, dieta 'detox', dieta 'Fast 5:2', dieta 'low-fat', paleodieta... y así hasta un número indeterminado de 'soluciones' cuya eficacia está lejos de ser respaldada por la ciencia. No existen los milagros a la hora de perder peso y sí un elevado riesgo para ti.

Normalmente, las dietas milagro inducen una restricción calórica muy severa, que generalmente conduce a situaciones de carencias en vitaminas y minerales y alteraciones metabólicas, que las hace insostenibles en el tiempo y peligrosas para la salud.

El problema es que están por todos lados y recibimos un gran número de impactos que nos incitan a su uso: programas de televisión, revistas de moda, revistas de alimentación, la celebrity de turno en sus perfiles de RRSS o simplemente el prescriptor amigo o conocido que nos la recomienda. Estamos demasiado expuestos a su influencia y a sus efectos negativos. Y la mayoría de las veces, ese 'interés' por nuestra salud oculta uno mucho más lucrativo que nada tiene que ver con nuestro bienestar.

3 consejos lógicos

Así pues, solo nos queda advertirte de las consecuencias de una mala elección y recomendarte encarecidamente que visites a tu médico para que pueda facilitarte una dieta que se adapte a tus necesidades y circunstancias, siguiendo tres principios fundamentales:

1. Dieta equilibrada. Carne, pescado, legumbres, pasta, verduras, frutas, aceite, productos lácteos... Todo tiene cabida en su justa medida.

2. Realizar 5 comidas al día. Desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena.

3. Hacer ejercicio. De mayor o menor intensidad, pero el movimiento es necesario.

5 problemas de las dietas milagro

Tan sencillo y tan difícil de entender. Una paradoja que hoy día provoca que sean muchas las personas que apuesten por las dietas milagro que, entre otras cosas, pueden:

1. Favorecer el efecto rebote.

2. Alterar el metabolismo de las personas, lo que puede desembocar en enfermedades.

3. Provocar desnutriciones proteicas y déficit en vitaminas y minerales.

4. Desencadenar trastornos del comportamiento alimentario como la anorexia o la bulimia y que supone, en ocasiones, situaciones de mayor gravedad que el exceso de peso que se pretendía corregir.

5. Producir efectos psicológicos negativos.