NUTRICIÓN

Cómo perder peso sin hacer una dieta estricta

Comer la fruta más pequeña, evitar las salsas, cocinar con una pizca de aceite de oliva virgen extra, ir al mercado todos los días, congelar comida… son pequeños gestos para ingerir menos calorías sin hacer una dieta estricta.

Planear un menú cuando estamos realizando una dieta o un control mayor de lo que comemos es algo más que necesario. Ya que podemos pensar que atiborrarnos a frutas y verduras es realmente positivo, y sí, pero también encontrar un equilibrio y, sobre todo, mirar la letra pequeña de cada alimento, porque las calorías pueden traicionarnos.

Mirar las calorías de las frutas

El aguacate, por ejemplo, es un fruta llena de beneficios para el organismo, pero también muy calórica. Las cerezas y las pasas son de las frutas también con más calorías, por lo que a la hora de planificar un menú es recomendable hacer una mezcla adecuada.

Cómo cocinar para no engordar

Un paso que podemos pensar es liviano, pero no lo es, es la manera en que preparamos las verduras. Obviamente, no es lo mismo una verdura al vapor que una verdura salteada con aceite.

Por supuesto, fresco es lo mejor, pero si cocinas verduras, es mejor con poco aceite, y de buena calidad, un aceite de oliva virgen extra es siempre la mejor opción. Si vas a hervir las verduras se perderán muchos nutrientes, ya que estos se pierden en el agua; si vas a hacer un puré será una de las mejores opciones. Y si esa agua que tal vez no usas lo utilizas para tus plantas favoritas, la evolución será brutal.

Evita las salsas

Si estás realizando una dieta, o estás controlando tu peso, evita las salsas extras, los aderezos y aliños. Si quieres aportar dulce por ejemplo a unas rebanadas de manzana asadas, añade canela en lugar de mantequilla o caramelo. Si vas a preparar un snack con palitos de zanahoria, por ejemplo, mejor yogur desnatado que una salsa.

Ir al mercado cada día

Además de ser una manera de comer fresco, también le dará una idea de qué productos son de temporada, están en mejor estado, cómo van evolucionando las verduras... además de ahorrar en muchos momentos.

Congelar es una buena opción

Si no puedes comer verduras frescas, es mejor que congeles cuando puedas en lugar de comer de lata, ya que estas últimas tienen más sal. De la misma manera que si necesitas comprar fruta en latas, es mejor en agua o en su jugo que en almíbar, ya que tienen mucho m,¡ás azúcar.

Adiós a los frutos secos

Pero sólo si eres un enamorado de los frutos secos. Son fuente de energía y omega 3 y 6, pero es verdad que el aporte calórico es alto. Por eso, un puñado de frutos secos al día será suficiente para saciar tu gusto.

Fruta más pequeña

Si estás a dieta o intentando reducir el consumo de calorías, debes cambiar también la manera en que consumes la fruta. Por ejemplo, uvas y cerezas, reduce la porción a 17 piezas. Y si prefieres manzanas, naranjas, melocotones, que no sean más grandes que una pelota de tenis. Un plátano grande puede llegar a tener hasta 200 calorías, por eso hablamos de trozos de fruta pequeños.