Cómo afecta al cuerpo un aneurisma cerebral

A raíz de la operación de urgencia al piloto Luis Moya tras sufrir una aneurisma cerebral, nos hemos preguntado por las posibles causas, cómo detectarlo a tiempo, las consecuencias y cómo afecta al cuerpo una operación así en el cerebro.

Qué es una aneurisma cerebral

Un aneurisma cerebral es una protuberancia o dilatación en un vaso sanguíneo en el cerebro. Puede presentar una pérdida o una rotura, y causar sangrado en el cerebro (el llamado accidente cerebrovascular hemorrágico). En ocasiones, la rotura de un aneurisma cerebral se produce en la zona entre el cerebro y los tejidos delgados que recubren el cerebro. Este tipo de accidente cerebrovascular hemorrágico se denomina 'hemorragia subaracnoidea'. La rotura de un aneurisma se convierte en una amenaza para la vida y requiere de intervención de manera urgente.

El gran problema para detectarlo es que la mayoría de los aneurismas cerebrales no crean problemas a primera vista y no causan síntomas. A menudo, dichos aneurismas se detectan durante otras pruebas.

Causas de un aneurisma cerebral

Dado que en ocasiones los aneurismas cerebrales no muestras síntomas claros, es importante que estés atento a algunas causas como pueden ser:

-dolor de cabeza repentino y muy intenso

-náuseas y vómitos

-rigidez en el cuello

-visión borrosa o doble

-sensibilidad a la luz

-convulsiones

-caída del párpado

-pérdida del conocimiento

-confusión

Eso sí, no siempre estos síntomas son una respuesta a un aneurisma. Es importante consultar al médico pero tener presente otros factores, como:

-edad avanzada

-tabaquismo

-presión arterial alta (hipertensión)

-abuso de drogas, especialmente el uso de cocaína

-consumo excesivo de alcohol

-golpes o lesiones, son algunos de los más frecuentes, y cobran especialmente importancia porque no solemos dar importancia a un pequeño golpe en la cabeza, vigilar sobre todo al salir del coche, que son los más comunes.

Consencuencias

Si la aneurisma se detecta a tiempo, y se trata, las consecuencias son mínimas. Eso sí, durante las primeras semanas o tal vez meses hay que tener una vida más pausada.

-tener una dieta más saludable.

-realizar ejercicio moderado.

-tomarse el trabajo con más relajación.

-evitar el estrés.

-durante 12 meses más o menos estarás en tratamiento con el equipo médico para vigilar que no vuelva a ocurrir y que todo sigue en orden.

-una vez te den el alta, puedes hacer vida normal.