PREVENCIÓN

“A contramarcha salva vidas” para proteger a los niños en el coche

Esta iniciativa que impulsa la colocación de las sillas infantiles a contramarcha del coche para minimizar el daño de los menores en caso de accidente.

Con P de Patricia

"A contramarcha salva vidas" tiene como objetivo reducir la probabilidad de que los pequeños sufran daños graves, irreversibles o fatales.

Y es que, existe una posición alternativa a la tradicional de instalar las sillitas infantiles de modo que los pequeños miren hacia adelante. Colocando a los niños en posición contraria a la marcha el sistema de retención absorbe el impacto y el niño no sufre un golpe tan seco contra los arneses, como ocurre en el caso contrario.

El movimiento "A Contramarcha Salva Vidas" consiste en concienciar sobre la importancia de transportar a los más pequeños en el coche de una manera concreta (de espaldas a la marcha) y más segura. La ley obliga a llevar a los más pequeños en sus respectivos sistemas de retención, sin embargo, no hay ninguna que imponga o exija hacerlo a contramarcha. Para esclarecer y explicar a todos los padres los beneficios de colocar de esta manera a los niños en sus vehículos, surge "A Contramarcha (ACM)", que tiene como objetivo evitar lesionados en accidentes.

Ventajas de ir a contramarcha

Según el movimiento ACM, la gran ventaja es la seguridad de los niños. Como prueba de ello, los países escandinavos que han adoptado esta medida son los que tienen la tasa más baja de mortalidad infantil en el mundo.

No hay duda de que los niños tienen un índice de desarrollo completamente distinto a los de los adultos. Sus cabezas, cuellos y espaldas tienen un nivel menor de resistencia a un impacto, son mucho más frágiles que las partes de un adulto.

Si tenemos en cuenta esas tres partes en la edad de un recién nacido y en la de un adulto, las proporciones son muy distintas: la cabeza de un bebé representa alrededor del 20 por ciento del cuerpo, mientras que en la de un adulto el porcentaje en relación a todo el cuerpo es menor; el cuello de un recién nacido es muy corto y apenas produce fuerza, en una persona de unos 20 años, la evolución es notable.