Los 7 consejos por los que deberías empezar ya a practicar yoga

El yoga es una disciplina que se adapta a todos los niveles. Desde quien no sabe nada, a quien ya controla respiración y realiza saludos al sol. Es una práctica deportiva que va más allá, en muchas ocasiones es un método de vida. Es, sobre todo, relajación, conexión, casi meditación, se acerca al mindfulness.

El yoga es un todo que nos ayuda a concentrarnos, a ser conscientes de nuestro cuerpo, a escuchar nuestra respiración, a vivir de manera más activa el aquí y el ahora, a marcarnos tiempos para nosotros mismos.

Hoy además te damos 7 consejos por los que deberías empezar ya a practicar yoga.

Flexibilidad

Si estás muchas horas sentado, la espalda sufre. Si estás muchas horas de pie, las piernas y la espalda sufren. El cuello, los brazos, acaban siendo grandes damnificados. Practicar yoga te hará ser más flexible porque te permitirá ir incrementando movimientos, estirarte, probar posturas nuevas. Un gran paso para empezar en verano nuevos rituales de deporte y vida que te serán muy útiles de cara al otoño.

Mejora la postura

Sí, y mucho. Espalda más erguida, una mejor posición para estar sentado, incluso para dormir. Además fortalece el cuello, que es nuestro eje.

Sistema nervioso

Practicar yoga nos relaja, no sólo en los momentos en los que estamos concentrados, sino que nos permite ser capaces de trasladar esas sensaciones en otras ocasiones. Un cuerpo descansado es un cuerpo cuyo sistema nervioso está tranquilo. Y es fundamental.

El yoga es bueno para los huesos

Practicar yoga mejora y fortalece nuestra masa ósea. Además, baja los niveles de cortisol o de la hormona del estrés, lo que nos permite conservar el calcio de los huesos. Esta práctica deportiva nos llevará también a una alimentación más sana y saludable, por lo que cuidar nuestro cuerpo será un círculo de bienestar.

Mejora el tránsito intestinal

Practicar yoga ayuda en nuestras digestiones, en el tránsito intestinal, evita el estreñimiento. El sistema nervioso y las emociones están muy relacionadas con el estreñimiento, por lo que a través del yoga mejorar la relajación hará que también vayamos mejor al baño. Las diferentes posturas, estiramientos y movimientos son fundamentales.

Mejora la respiración

Es fundamental. En muchas ocasiones centrarnos en respirar nos relaja. Es uno de los principios además de la meditación. A través de las asanas o diferentes posturas y las técnicas respiratorias, o el 'pranayama' que se llama, aprenderemos a proteger de manera natural nuestro cuerpo. Dicen que el yoga podría tener una gran función para proteger nuestro cuerpo de virus y bacterias. Respirar por la nariz y no por la boca, como ocurre en las personas con asma o problemas respiratorios ya es un gran paso en esta línea.

El yoga protege el corazón

Las diferentes posturas, según el nivel de flexibilidad que vayamos teniendo nos ayudarán a proteger nuestro corazón. La circulación se regula y permite el paso de más oxígeno desde las extremidades.