NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Surf

Despierta la ola gigante "Hombre muerto"

Ubicada en Sídney, Australia, Deadmans es una de las olas gigantes -y mutantes- más violentas y complicadas del mundo del surf de olas grandes.

Un surfista surfea una ola gigante en Deadmans (Sídney, Australia) justo antes de llegar al escalón de la muerte, el 2 de abril del 2022.
YouTube

Que la temporada de olas gigantes esté llegando a su fin en el hemisferio norte no significa que se acabe el surf XXL. De hecho, no se descarta todavía que olas como Nazaré o Jaws den sus últimos coletazos antes de descansar durante los meses de verano. Pero lo que sí está claro es que en el sur empiezan a despertar las olas gigantes que han dormido durante el verano austral. Una de ellas es Deadmans.

Esta ola ubicada en Sídney (Australia) está considerada como una de las más complicadas y violentas del país oceánico y del mundo. De hecho, el nombre lo dice todo: Deadamans, o lo que sería lo mismo, Hombre Muerto. Parte de la culpa la tiene no solo la gran cantidad de agua que mueve y la altura que puede alcanzar, sino el escalón que se forma a mitad de la ola y que lleva a los surfistas directos al infierno.

El caso es que este fin de semana Deadmans recibió una marejada histórica que será recordada durante mucho tiempo en el mundo del surf. Ahí estaban unos cuantos valientes dispuestos a superar todas las dificultades de la ola. La mayoría fracasaron en su intento y acabaron con su cuerpo moviéndose por el agua a merced de la fuerza del mar. Pero alguno también triunfó, tal y como se puede ver nada más empezar el vídeo -en crudo- que está viralizando de esa sesión. Muestren sus respetos a Max McGuigan, surfista protagonista de dicha bomba.

Otra muestra de fuerza de estas marejadas que están azotando la costa este de Australia es la que se pudo ver en la icónica playa de Bondi Beach -también en Sídney- donde el agua cubrió toda la playa e incluso llegó a la zona urbanizada. Hay imágenes que ponen los pelos de punta.

Según cuenta el fotógrafo Benny Kappler, que asegura haber hablado con algunos locales de Bondi, "es el mayor swell desde 1974". La magnitud es tal que también tiene una parte mala: en algunas partes de la costa están habiendo inundaciones y destrozos que han obligado a los servicios de emergencias a realizar decenas de rescates...