Valero, Betalú, Ródenas… los favoritos, contra el viento de un territorio por explorar
Manuel Tajada, director técnico de la NEOM Titan Desert Saudi Arabia, analiza para AS el recorrido de la carrera. Este martes, primera etapa.
Dentro de un pelotón de 220 corredores, puede pasar de todo. Sorpresas, héroes inesperados, errores de orientación, malas jornadas… Nadie está a salvo de los caprichos del desierto. Josep Betalú, ganador de cuatro ediciones, los medallistas olímpicos David Valero y Carlos Coloma, los ex ciclistas profesionales Haimar Zubeldia, Melcior Mauri y Triki Beltrán o la campeona de Europa de ultramaratón, Ariadna Ródenas, sin embargo, parten desde la pole en la segunda edición de la Titan Desert Arabia Saudí, que arranca este martes en la NEOM Beach Games Athletes Village, una villa deportiva situada a orillas del Mar Rojo. Su trayectoria profesional o la experiencia en las Titan World Series les avala.
En la primera etapa, deberán afrontar un recorrido de 107 kilómetros con 220 metros de desnivel. Sin grandes dificultades montañosas, las condiciones climatológicas, como a lo largo de todo el recorrido, de más de 400 kilómetros, plantean los principales interrogantes. “El viento y el calor van a ser los dos factores más determinantes. Estarán presentes todos los días. Intuyo que va a ser una carrera de grupos. No habrá grandes diferencias entre los primeros clasificados”, explica el director técnico de la carrera, Manuel Tajada, a este periódico.
Por segunda vez en la historia, el universo Titan aterriza en Arabia. Esta vez, sin embargo, lo hace en un territorio inexplorado, NEOM, un megaproyecto de ciudad futurista que, en términos de diseño de carrera, ha supuesto un reto. “La idea era mostrar un sitio por el que nadie ha rodado antes. Al ser una zona no habitada, hemos tenido la dificultad de no encontrar pistas que conecten los distintos puntos. Por ello mismo, puede ser decisivo el uso de GPS, porque las pistas no están marcadas”, revela Tajada.
En la segunda etapa, los participantes deberán afrontar tramos con cañones, costa y pasos arenosos; en la tercera, antes de una cuarta jornada que vuelve al punto inicial del recorrido, aparecerán las rampas más importantes de la edición, con un desnivel acumulado de 1.133 metros. “El recorrido tiene parte de montaña, en la etapa reina, o una segunda jornada muy variada. En general, hay muchos kilómetros pegados a la línea de la costa, que supondrán la mayor parte del recorrido”, analiza el director técnico de la carrera, que no descarta las posibilidades de ningún aspirante al primer cajón: “En la Titan, la experiencia es muy importante, pero el rendimiento de corredores como Valero puede compensar”, valora. Este martes, se empiezan a despejar las incógnitas.