Remco también asusta

El ciclismo moderno no entiende de calendarios. Las grandes estrellas del pelotón salen a ganar siempre, desde su primera carrera a la última. “Se ha maximizado el potencial del ciclismo, ya no se reduce todo a las grandes vueltas. Hay televisión en todas las carreras, cada momento es importante para las marcas”, explicaba esta semana Xabier Muriel, uno de los directivos de rendimiento del Movistar, en AS. Tadej Pogacar en Andalucía, Jonas Vingegaard en O Gran Camiño y Remco Evenepoel en el UAE Tour. Los tres cerraron febrero con una ronda por etapas. Los tres se observan, ya sea desde la distancia o bien cerca, como desde este domingo en la París-Niza, con el esloveno y el danés presentes.

Con ellos, no estará un Evenepoel que también asusta. En los Emiratos, firmó un primer puesto perfecto. Dominó la carrera desde el primer día, siendo el factor diferencial incluso en las etapas llanas, dinamitó los puntos clave y sumó kilómetros de mucha calidad para estas fechas. Así lo dicen sus números: “Fuimos a toda máquina desde el principio de la subida hasta el final, una locura. Después de los primeros dos kilómetros, miré el medidor de potencia y habíamos hecho más de 500 vatios durante tres minutos”, declaraba el belga tras la última etapa, en referencia a la mítica ascensión al Jebel Hafeet (10,7 km al 6,8%).

Una barbaridad. Cifras de récord, como demostró Adam Yates, que se llevó la victoria parcial y el mejor tiempo de siempre en el puerto (26:13). Evenepoel, sin hacer ruido, gestionando la renta que tenía para conquistar la general, se quedó muy cerca, en la línea de los anteriores récords en la ascensión, propiedad de Pogacar. “Todavía no estoy en todo mi potencial, todavía tengo que entrenar en altura y perder algunos kilos. Pero mis valores aquí eran muy altos, incluso podría estar delante de cara al Giro de Italia”, ponía en contexto Remco. “En el último kilómetro lo alcancé (a Yates), aunque tenía dos motos delante. A mí también me hubiera gustado tenerlas”, añadía, mostrándose algo molesto por la situación.

Ya en el Teide

De las palabras a los hechos. Como Wout van Aert estos últimos días, Evenepoel ha elegido el Teide (Tenerife) para sus entrenamientos en altura. Este jueves, aterrizó en la isla española. Sus compañeros Jan Hirt y Louis Vervaeke, así como el entrenador Koen Pelgrim, le acompañarán en una concentración que finalizará para la Volta a Catalunya (del 20 al 26 de marzo), el gran test por etapas para Remco antes de su gran objetivo de la temporada: el Giro. “Todavía no he entrenado en altura, lo haré en unos días, así que solo puedo mejorar. Son solo buenas señales y tenemos que seguir así. Ahora, subiremos y comenzaremos el verdadero trabajo específico hacia el Giro”, anticipaba aún en tierras árabes. La temporada, que ha arrancado disparada, sube aún más el ritmo.