Pogacar: “Tal vez hice un ataque bastante estúpido”

Un juego de niños que se tornó en agonía. Tadej Pogačar empezó arrasando en la prueba de fondo del Mundial y acabó sufriendo para colgarse su primer oro en esta competición. La razón no fue otra que la de una cabalgada que comenzó con un ataque a 100 km de meta, que tal como confesó el esloveno en zona mixta y la rueda de prensa posterior a la carrera, no estaba planeado.

—Ya casi lo ha ganado todo. ¿Qué significa ser campeón del mundo?

—No lo sé. No puedo creer lo que acaba de pasar. Después de este tipo de temporada, me puse mucha presión sobre mí mismo para este día. Tenía presión de mí mismo y del equipo. Vinimos aquí por la victoria. La carrera fue bastante rápida y hubo una escapada peligrosa delante. Y sí, tal vez hice un ataque bastante estúpido, pero por suerte Jan (Tratnik) estaba ahí conmigo. Nunca me rendí, fui hasta el final. Es un día increíble. No puedo creer lo que acaba de pasar.

—¿No estaba planeado atacar cuando faltaban 100 km?

—No, por supuesto que no. Planeamos mantener la carrera bajo control. La verdadera carrera empezó muy temprano y no sé en qué estaba pensando. Me dejé llevar y por suerte lo logré. Pero fue muy duro, increíble.

—Realmente, deseaba este título.

—Sí, seguro. Después de muchos años luchando por el Tour de Francia y otras carreras, nunca tuve un campeonato del mundo como claro objetivo. Y este año todo ha ido sobre ruedas. Una temporada perfecta, después de ganar el Mundial, que era un objetivo muy grande. Simplemente, no puedo creer que haya sucedido. Tengo que dar las gracias a todo el equipo, sin ellos sería imposible. Estoy superorgulloso de la selección nacional.

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—¿Cómo vivió esos últimos kilómetros tan agónicos?

—No tuve miedo, Tratnik me esperó y fuimos juntos. Era muy pronto, pero sabía que si conseguía un hueco sólido no habría equipos fuertes detrás empujando y tendría una oportunidad. Traté de no llegar al límite según fueron pasando los kilómetros. No me rendí y creí hasta línea de meta.

—¿Preparado para llevar el arcoíris?

—Cuando éramos niños tenía el sueño de tener este maillot y ganar el Tour de Francia. Este año era una oportunidad perfecta, por el recorrido y lo preparé bien. Es más que un sueño hecho realidad. No puedo esperar para lucir este maillot en las próximas carreras. Será divertido.

—¿Les afectó el fallecimiento de Furrel?

—Es difícil ver lo que ha pasado. Todos ayer y hoy corrimos por ella, en nuestro pensamiento. Es una tragedia. El ciclismo cada vez es más peligroso. Tenemos que tener más cuidado en la carretera, cuidarnos unos a otros cuando vamos en grupo, respetarnos. Le deseo lo mejor a su familia.

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