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CICLISMO

Markel Beloki, nueva promesa del ciclismo español, fichará por el EF Education

El hijo del mítico Joseba Beloki será nuevo corredor del EF Education la próxima temporada, dando el salto al World Tour desde categoría juvenil.

Markel Beloki, en los Nacionales de Madrid.
RFEC

“Tiene un perfil bastante escalador, completo, un corredor que puede ir en la línea de las clasificaciones generales. Desde luego, no es un esprínter, no es un corredor especialmente rápido. Tiene condiciones más de resistencia y escalada”. Este fue el análisis que hizo Patxi Vila, responsable de rendimiento del equipo Movistar, al ser preguntado en AS el pasado mes de enero por la figura de Markel Beloki. El hijo de Joseba, mítico exciclista español, completó con éxito en invierno unos días de concentración con el equipo telefónico, dada la prometedora trayectoria que lleva en categorías inferiores en los últimos años en las filas del MMR Cycling Academy. Y sus fabulosas condiciones no han pasado inadvertidas más allá de nuestras fronteras…

Y es que el joven Markel, de 18 años, fichará la próxima temporada por el equipo EF Education, por lo que dará el salto a la categoría World Tour directamente desde junior. Así ha podido corroborarlo AS, y aunque el anuncio todavía no se ha hecho oficial, la promesa española llegaría a la primera plantilla de la escuadra estadounidense de forma directa, a pesar de que el CEO del equipo, Jonathan Vaughters, dispone de un equipo de desarrollo para los jóvenes talentos. Su precocidad, como los recientes ejemplos de Carlos Rodríguez y Juan Ayuso, le llevan directamente a foguearse en citas de primer nivel. Después de logros como el oro nacional contrarreloj, plata en fondo y su próxima convocatoria para los Mundiales de Glasgow con la Selección junior, no cabe duda de que ha hecho méritos.

Para mayor tranquilidad, pensando en una futura estabilidad durante su desarrollo, cabe señalar que Markel firmará con el EF Education por tres temporadas, por lo que tendrá tiempo de sobra para mostrar unas condiciones que, tal como tontó Vila a este diario, son similares a las de su progenitor: “La dirección puede ser esa. Como hacemos todos un poco, intentar parecernos a nuestros padres o incluso, que ellos nos encaminan hacia donde les ha ido mejor en la vida. Física y fisiológicamente creo que es un chaval bastante longilíneo, con altura (más de 1,80 m) y buena planta encima de la bici. Su nivel técnico está bastante desarrollado, con buenos conocimientos de lo que es ser ciclista”. Solo queda verle en acción para corroborar que estamos ante una nueva estrella en ciernes del ciclismo español. Llegan buenos tiempos.