Lluc Crusellas, de mejor chocolatero del mundo a titán

El 31 de octubre de 2022 cambió su vida. Lluc Crusellas, de 26 años, tras dos años de intenso entrenamiento, se convertía en el mejor chocolatero del mundo en el World Chocolate Master celebrado en el Salon du Chocolat, en París. Ahora, con esa misma pasión, buscará convertirse en titán, con la SKODA Titan Desert Morocco 2023, que se celebrará del 30 de abril al 5 de mayo del próximo año, como objetivo y mayor reto deportivo de su vida. “Ciclismo y pastelería para mí siempre han ido de la mano. Creo que el deporte me ha aportado los valores de constancia, sacrificio y actitud necesarios para enfrentarme a los objetivos. El deporte y conectar con la naturaleza es una gran fuente de inspiración. Los colores, las texturas orgánicas… cojo ideas para después llevarlos a la pastelería”, explica.

Tanta es la pasión por el ciclismo de Crusellas que se ha hecho bordar un detalle que los aficionados sabrán valorar: la bandera arcoíris en el cuello de su chaquetilla como guiño a los colores del maillot que llevan los campeones del mundo de ciclismo. Con ese mismo espíritu que le acompaña en su día a día, Crusellas quiere afrontar las seis etapas que componen la prueba de las Titan World Series: “La Titan significa mucho para mí. Todavía recuerdo que, cuando era pequeño, presentaron una de las primeras ediciones en Vic. Aquello se convirtió en un sueño: poder ir una vez en la vida a la Titan. Este año que viene se va a cumplir: podré ir a la Titan y disfrutarla como ese niño pequeño que competía en bici”, recuerda.

Para ello, Lluc ha confiado en el equipo más experimentado, el de KH-7, y la ayuda de su capitán, el Titan Legend Melcior Mauri. “Para mí es una gran suerte ir en el equipo KH-7 con Melcior a la cabeza. Hace que pueda ir tranquilo. Cualquier duda la va a poder solucionar y allí me tendré que preocupar de pedalear y disfrutar la experiencia”. Antes, queda un arduo camino: llegar en forma, entrenar los pasos de dunas, la navegación… pero ello le sirve de motivación: “Es cierto que he estado dos años preparando intensamente el campeonato del mundo de chocolatería. En este tiempo he entrenado menos, pero no he dejado de ir en bici. Ahora tengo estos meses hasta que empiece la Titan para entrenar a tope y disfrutarlo al máximo”. Y añade que “el principal miedo que tengo es el calor que pueda hacer. También la inexperiencia en este tipo de carreras con el desierto, las dunas, la arena… pero también me gusta la aventura. Sé que voy a ir bien arropado con el equipo KH-7 y podré vivir esta aventura al máximo”.