El autor del atropello mortal a Estela Domínguez, castigado con 18 meses de multa
El juez le aplica la pena máxima por el “delito leve de homicidio por imprudencia menos grave”. Juan Carlos Domínguez, “indignado” con el desarrollo del juicio.
El juez ha condenado al autor del atropello mortal a la ciclista Estela Domínguez a la pena máxima prevista para el “delito leve de homicidio por imprudencia menos grave”, que son 18 meses de multa (un total de 5.400 euros) y la prohibición de conducir durante 18 meses.
Esta era la pena solicitada por la Fiscalía y por la acusación particular, según detalla la sentencia, publicada este lunes por la mañana tras el juicio del viernes pasado en el Juzgado de Instrucción Número 2 de Salamanca.
El padre de Estela, el exciclista Juan Carlos Domínguez, salió “indignado” con el desarrollo del juicio, una sesión que terminó con enfrentamientos y a gritos de “¡qué barato sale matar!”
Domínguez quería que el juicio sirviera para “sacar la verdad” y se siente frustrado por que no haya sido así: “Siempre he dicho que hay 600 metros de una recta en la que tuvo que estar viendo a Estela durante muchos segundos, y eso desgraciadamente no se lo hemos podido decir, y no se ha hablado de ello y los testigos que iban detrás es allí donde la vieron”.
La promesa del ciclismo Estela Domínguez, de 18 años, falleció en el acto el 9 de febrero de 2023 cuando entrenaba en la N-630 a la altura del polígono industrial del municipio salmantino de Villares de la Reina, tras ser arrollada por un camión de dos ejes que conducía un mecánico, el acusado B.G.H, para hacerle pruebas técnicas a unos 300 metros del taller de su hijo.
Hasta el juicio, los padres de Estela no habían recibido comunicación directa o indirecta del autor de los hechos ni de su defensa para ofrecerles las condolencias o una explicación, sólo la indemnización del seguro, de 218.500 euros.
B.G.H., ahora condenado, explicó que iba probando un camión y que escuchó “un ruido metálico” pero no frenó ni vio a la ciclista “en ningún momento”, aunque le pasó por encima con su vehículo. Pasado un tiempo volvió al lugar de los hechos con otro vehículo del taller de su hijo situado a unos 300 metros, algo que justifica en que pensó que se le había caído algo.
El Ministerio Fiscal explicó en el juicio que se habla de “delito por imprudencia menos grave” en referencia a la “acción del acusado, no del resultado, que en este caso no pudo ser peor”, al tiempo que ha afirmado que este caso “está muy próximo a la imprudencia grave”, por lo que se pidió la pena más alta.