Cavagna: “No vine a Movistar para estar entre los 50 primeros de la Vuelta a Bélgica”

El ciclista francés Rémi Cavagna ha puesto de manifiesto que, en muchas ocasiones, los cambios de aires no tienen los resultados esperados. Cavagna, conocido en el pelotón como ‘el TGV de Clermont-Ferrand’, concedió una entrevista a L’Équipe antes de competir en la prueba contrarreloj de los Campeonatos Nacionales de Ciclismo de Francia en la que habló de su fichaje por el Movistar.

Una entrevista en la que Cavagna confiesa la dureza del cambio, aunque no se arrepiente del desafío. “No pensé que la transición del Quick-Step al Movistar fuera tan difícil. No vi las cosas así. Fueron siete años fantásticos en el Quick-Step, pero estaba en una edad en la que quería algo más. De todos modos no me arrepiento de mi decisión”

Cavagna justifica sus problemas de adaptación con la barrera del idioma, que cree que le perjudica en los momentos clave. “Lo más difícil es la barrera del idioma. He mejorado mi español, me han dado clases y entiendo casi todo, pero cuando quiero expresarme un poco o imponerme, me da corte. Los españoles siempre están juntos, todo en la radio es en español y eso es complicado en momentos difíciles de la carrera. Lo admito, es complicado”

El francés aún no sabe si estará en el equipo del Tour, carrera que espera que sea un revulsivo para su adaptación en el Movistar en el caso de ganar una etapa. “No sé si correré en el Tour, creo que sí, pero aún no lo sé. Mi calendario cambió y no me podía concentrar en los objetivos. Reconocí las etapas del Tour, son preciosas, algunas de ellas brutales... Y sé que una victoria en el Tour puede cambiar una carrera. Si no corro el Tour sería un golpe durísimo para mí. Pero no pierdo la esperanza. Aunque no haya empezado bien el año, siento que voy cogiendo impulso y basta un cambio para pasar del rojo al verde. Cambié de equipo para cambiar mi calendario pero tengo la impresión de seguir aquí... No vine aquí para esto”

Cavagna también se mostró disgustado por el hecho de que Movistar no respetase su propuesta de calendario después de ponerle a competir en Bélgica cuando él quería hacerlo en Dauphiné. “Vine al equipo para evolucionar, para dar un paso adelante en las cronos y me he desmoronado en unos meses. No vine aquí para estar entre los 50 primeros de la Vuelta a Bélgica, ese no es mi lugar, no es lo que valgo. Pero eso no le molesta a nadie excepto a mí. No me voy a rendir porque tengo tres años de contrato. Tengo que comunicarme, es la base de todo, como en una pareja, y tenemos que avanzar juntos”.

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