Benidorm anuncia candidatura para el Muncial de CX con confianza por los ‘capos’

El 18 de enero volverá a ser una cita ineludible con el ciclismo en España. Concretamente, con una disciplina que está ganando multitud de adeptos en los últimos años: el ciclocross. Ese día se celebrará la cuarta edición de la Copa del Mundo de ciclocross de Benidorm, joya del mediterráneo donde este viernes tuvo lugar la presentación oficial de la prueba. “Un evento moderno, espectacular e igualitario. Una fiesta del deporte”, tal como aseguran sus organizadores.

El acto fue más especial si cabe este año, porque transcurridos unos minutos llegó el momento más esperado: el anuncio de la candidatura de Benidorm para ser sede del Mundial de ciclocross de 2031 (Flanders Classics, empresa organizadora de este deporte, tiene las sedes cerradas hasta 2030). “Es un nuevo reto. Las cosas que funcionan hay que cuidarlas, pero hay una alianza que va a empujar con muchas ganas para que Benidorm albergue el Mundial de ciclocross. Un evento de un nivel superior, pero estamos preparados tanto en la ciudad como los que formamos parte de este proyecto. Vamos a por ello y será maravilloso”, explicó Toni Pérez, alcalde de Benidorm.

De confirmarse esta nueva ilusión por parte de la UCI, sería la segunda vez que Benidorm acoge un campeonato del mundo relacionado con el ciclismo, ya que en 1992 celebró el Mundial de carretera en el que se coronó el mítico Gianni Bugno. “La idea surge de todas las personas responsables para que todo esto sea posible. Trabajaremos para que se convierta en realidad. En septiembre, la UCI decide en su congreso anual a quien le concede ese Mundial. Seguiremos empujando como hemos hecho hasta ahora, somos una de las organizaciones más potentes en la Copa del Mundo y tenemos que seguir haciéndolo igual de bien”, resumió Pascual Momparler, sobre lo que supondría el regreso de un Mundial de ciclocross a España 41 años después, siendo el último precedente en Getxo en 1990.

Un circuito con novedades

Momparler, ideólogo de esta fiesta de la bicicleta, confirmó que la próxima edición del Benidorm CX será la más novedosa en cuanto al trazado: “El circuito va a cambiar totalmente. La famosa recta de meta será un arenero, con más de 100 metros de longitud. Ahora le llegada a meta será en subida, después de unas escaleras. Un circuito renovado, porque en Benidorm no nos ponemos techo. Nos obligamos a mejorar cada año para estar a la altura de esta ciudad”. Además, la perspectiva de asistencia vuelve a ser la mejor posible: “Volveremos a tener 16.000 personas animando”.

Más en el aire está la participación de Mathieu van der Poel y Wout van Aert, que un año más serían los grandes reclamos de la carrera. “Tenemos confianza en que estén. Creo que habrá sorpresas y tendremos dos regalos de Navidad”, respondió Momparler a la pregunta de AS sobre la presencia de las dos grandes estrellas. Hay optimismo con el neerlandés, ya que Alpecin (su equipo de carretera) es patrocinador principal del próximo Benidorm CX, pero también con el belga, que desde el 13 de enero estará en Benidorm con motivo del día de medios del conjunto Visma. Sería la guinda a un evento que no tiene techo.

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