Luis García del Moral, inhabilitado de por vida en Estados Unidos por el Caso Armstrong, ejerce como director médico del Instituto de Medicina del Deporte (IMD) de Valencia. A su vez, esta clínica asume los servicios de salud del Centro La Petxina, un complejo de tecnificación deportiva de los 15 reconocidos por el Consejo Superior de Deportes en las comunidades autónomas como apoyo a los centros de alto rendimiento. En función de tal consideración, el CSD subvenciona desde 2003 parte de su actividad.

En 2011, la Comunidad Valenciana recibió del CSD 90.000 euros para La Petxina: 50.000 para gastos de inversión y 40.000 de funcionamiento. La presencia de García del Moral ha repercutido en que para 2012 no perciba nada. El complejo es propiedad del Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat participa en la gestión. El consistorio, a su vez, mediante una concesión administrativa tiene adjudicado el servicio de medicina de sus escuelas deportivas municipales al IMD.

Un portavoz de la concejalía de Deportes explicó a AS que el IMD de García del Moral "paga un canon al ayuntamiento por realizar el servicio y desde aquí no recibe ni un euro. Es una entidad privada y, por lo tanto, no tenemos competencias para inhabilitar ni relevar de su trabajo a nadie".

Al saberse en junio la implicación de García del Moral, médico del US Postal de Lance Armstrong de 1999 al 2003 (cuando ganó cinco de los siete Tours que ahora le pueden retirar), la concejalía dirigida por Cristobal Grau mostró su preocupación pidiendo orientación a la Agencia Española Antidopaje y al CSD. "Pero no hemos recibido contestación", dicen. Esta ha llegado en forma de presión económica.

Transfusiones. A Luis García del Moral se le acusa en el informe de la Agencia Antidopaje de EE UU (USADA), que ha desembocado en la petición de que la UCI retire los siete Tours a Armstrong, de "posesión, tráfico y administración" de sustancias dopantes. Además de la realización de transfusiones sanguíneas. La suspensión de por vida -también la del doctor italiano Michele Ferrari y el preparador español Pepe Martí, aunque este último ha recurrido-, según la USADA, tiene su base en el Código Mundial Antidopaje y conlleva la prohibición de "participar en cualquier actividad o competición organizada por los firmantes del Código".