Una alianza de cine

La renovada unión entre Banco Santander y la Fórmula 1 va más allá del patrocinio: una estrategia global para conectar con nuevas audiencias y acelerar su transformación desde el deporte, la innovación y la cultura.

Una alianza de cine
Kepa Conde
Redactor de Branded Content. Graduado en Periodismo por la Universidad Rey Juan Carlos, cursó el Máster de Periodismo EL PAÍS y realizó las prácticas en la sección Fútbol de As.com. ¿Su pasión? Viajar, descubrir y contarlo.
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Velocidad, precisión, emoción. La Fórmula 1 se ha convertido en mucho más que una competición automovilística: es un fenómeno global que mezcla tecnología, entretenimiento y cultura pop. En este escenario vibrante, Banco Santander ha reforzado su presencia apostando por una alianza estratégica que combina historia, innovación y visión de futuro.

Un deporte en constante evolución

Con la llegada de Liberty Media y la dirección de Stefano Domenicali, la Fórmula 1 ha vivido una renovación profunda. Deporte, sí, pero también narrativa global: desde la serie Drive to Survive hasta la nueva superproducción cinematográfica protagonizada por Brad Pitt, rodada en escenarios reales del campeonato. En esta evolución, marcas como Santander han sabido reconocer la oportunidad de conectar con audiencias más jóvenes y digitales, sin perder de vista su identidad.

Una alianza de cine
Zak Mauger

Recorrido conjunto renovado

Santander no es nuevo en este circuito. Desde 2006 ha estado presente en escuderías históricas como Ferrari y McLaren, y junto a pilotos legendarios como Fernando Alonso o Lewis Hamilton. Ahora, en 2025, abre un nuevo capítulo junto a Williams Racing, uno de los equipos más míticos de la parrilla. El español Carlos Sainz y el tailandés Alex Albon ocupan un asiento con muchas carreras a sus espaldas. El acuerdo incluye visibilidad en los monoplazas y trajes, pero también una participación activa en eventos, contenidos digitales y experiencias para clientes.

Cine y tecnología, de la mano

La implicación del banco no se limita a la pista. La reciente película de Apple Studios sobre F1 ha puesto a Santander en los cines de todo el mundo, con presencia real en boxes y decorado. Es parte de una estrategia que busca estar en el corazón de la cultura popular, en un momento en que la F1 se posiciona como referente de innovación técnica y narrativa visual.

Una alianza de cine

Del asfalto a la estrategia corporativa

Lo que une a Santander con la Fórmula 1 va más allá del marketing. La excelencia técnica, la sostenibilidad (la F1 aspira a emisiones netas cero en 2030) y la búsqueda constante de nuevas soluciones conectan con los pilares de transformación del banco. La propia Ana Botín lo resumía recientemente: “Durante casi dos décadas, desde que Banesto comenzó a trabajar con la F1, la fortaleza y el alcance global de este deporte han ayudado a Santander a conectar con sus clientes, profundizar en sus relaciones y fortalecer nuestra marca. Esta colaboración marca un nuevo e importante capítulo en nuestra relación en un momento en el que seguimos transformando y haciendo crecer nuestro negocio”.

Una ventana al planeta

La audiencia acumulada de la Fórmula 1 superó los 1.350 millones en 2023, con especial peso en mercados clave para Santander: Reino Unido, España, Brasil, México o Estados Unidos. En este último, donde la fiebre por la F1 ha explotado en ciudades como Miami, Austin o Las Vegas, la marca Openbank tiene un papel protagonista como punta de lanza digital del grupo.

Competir con propósito

Más que una cuestión de logos o visibilidad, esta alianza refuerza la apuesta de Santander por estar presente en espacios de alto impacto cultural y emocional. La F1, como la banca, se mueve por métricas y por pasión. Y ahí, cada curva cuenta.

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