Los hackers de Corea del Norte de nuevo online gracias a Rusia
El gobierno de EEUU hackeó a Corea, pero nuevos datos señalan que Rusia ha ayudado a Kim Jong-un.
La Guerra Fría fue un enfrentamiento político, económico, social, militar, informativo, científico y deportivo iniciado al finalizar la Segunda Guerra Mundial entre el llamado bloque Occidental (occidental-capitalista) liderado por Estados Unidos, y el bloque del Este (oriental-comunista) liderado por la Unión Soviética. Y su duración abarcó medio siglo XX, desde los años 40 a 1991, un tiempo en el que el mundo contuvo la respiración en no pocas ocasiones. ¿Por qué hablamos de ella? ¿Por qué desenterramos los conflictos del pasado? Porque parece que los fantasmas están volviendo, y que una nueva Guerra Fría ha comenzado, a tenor de todas las noticias que estamos viendo esta semana. Una Guerra Fría digital.
Victoria USA
El lunes pasado os hablamos de cómo Estados Unidos había empezado en 2014 una guerra digital contra Corea del Norte a base de hackeos para intentar trastocar los planes de esta sobre un posible uso de sus misiles balísticos intercontinentales. Estas escaramuzas digitales tenían como objetivo inutilizar los misiles coreanos para que no se pudieran lanzar o para variar su trayectoria justo tras el lanzamiento. Pero tras no obtener buenos resultados, a inicios de este año y ya con Donald Trump en el poder, se pasó a un tipo de ‘pirateo diplomático’, menos invasivo pero orientado a dificultar e incluso cortar el acceso a Internet de Corea del Norte, y por tanto del Bureau 121, la división hacker del dictador Kim Jong-un responsable de graves ciber-ataques contra infraestructuras americanas y del resto del mundo.
Y los USA tuvieron éxito. Consiguieron dejar al Bureau 121 sin acceso online para hacer ‘su trabajo’. Pero parece que Corea del Norte se ha repuesto rápido gracias a un aliado que entra en juego en este escenario bélico digital en la sombra. Un aliado que EEUU conoce bien: Rusia, la madre Rusia de Vladimir Putin. Para hacernos una idea de lo sucedido hay que saber un detalle: que Corea del Norte tenía su conexión a Internet a través de China, la ruta por la que Estados Unidos la atacó. Por tanto, sin el acceso chino el país no tiene posibilidad de estar online… Hasta que Rusia le ha proporcionado una segunda vía de acceso a través de su territorio, lo que supone un revés para Estados Unidos.
Sin cortes diplomáticos
Hecho público por medios y confirmado por especialistas como FireEye, una firma de ciberseguridad rusa para más señas, este segundo acceso permite a Corea del Norte volver a estar online, y a los americanos les bloquea directamente la opción del ‘corte de red diplomático’ que venían haciendo, un problema que se le suma al que ya tenían de por sí, ya que bloquear la Red de Corea del Norte a través de China suponía efectivamente amenazar políticamente no a uno, sino a dos países: Corea y la propia China, ya que el Internet de Kim Jong-un y su pueblo dependían directamente de la China United Network Communications, una compañía de la que el gobierno chino es propietaria.
Los ataques DDoS de denegación de servicios que los hackers americanos venían realizando a los servicios coreanos se han vuelto infructuosos, y en los USA tendrán que pensar otra manera de presionar a Corea del Norte, a la que ya le han impuesto sanciones de restricción en el combustible y en el gas que va al país. ¿Y qué saca Rusia de todo esto? Una gran visibilidad en el tráfico online que entra y sale de Corea del Norte según FireEye, dándoles a los expertos de Putin una idea de qué se traen entre manos Kim Jong y su Bureau 121.