Fecha, precio y características de Xbox One X versus PS4 Pro ¿merece la pena el 4K?
El nuevo sistema de Microsoft es una realidad.
Si algo ha supuesto la actual generación frente a las anteriores es la rotura total con el modelo de consola por generación. Desde la 7ª Gen hacia atrás, hemos tenido principalmente un modelo base -por ejemplo PS3 o Xbox 360- y a lo largo de su ciclo de vida de 7-8 años varias revisiones llamadas ‘Slim’ que aligeran y abaratan el precio del sistema. Pero con PS4 Pro y Xbox One X se ha roto eso, y en 4 años hemos tenido aparte de la revisión slim de ambas, una nueva iteración, una especie de versión 2.0 con un poco más de potencia y mejoras pero sin llegar a ser lo suficientes para la 9ª generación.
Fecha, precio y características de Xbox One
Como resultado hay tres modelos de PS4 y de Xbox One en el mercado ahora mismo: la normal, la slim y la PS4 Pro y Xbox One X. ¿A qué se ha debido esta fragmentación o saturación? Pues a la enorme velocidad con la que la tecnología está avanzando, y que en otros mercados como el de los móviles está provocando una saturación de productos enorme con teléfonos de 900 euros que se quedan anticuados a los 6 meses. La inclusión de la Realidad Virtual y las nuevas resoluciones como las 4K son factores esenciales para esto, pero ¿merece la pena pagar más por el 4K? Eso lo veremos después, concentrémonos ahora en el sistema del año junto a Nintendo Switch: Xbox One X.
La conocida anteriormente como Project Scorpio fue finalmente presentada en el evento Microsoft del E3 2017 celebrado hace 12 horas. Una bestia técnica que se ha ganado el título de consola más potente del mercado, al que llegará el 7 de noviembre al precio de 499 euros nada menos. ¿La promesa de Microsoft? Nada menos que 42 juegos a 4K para sus nuevo sistema disponibles el día de lanzamiento, 22 de ellos exclusivos. Pero ojo, que hablamos de 22 exclusivos de Microsoft, no exclusivos de One X, por lo que también saldrán en la Xbox One S, en la Xbox One (y quizás en Windows 10) porque One X sigue siendo un sistema de la 8ª Gen a pesar de todo.
Entre ellos habrá títulos a 4K nativos como el esperado Forza Motorsports 7 (3 de octubre en One S, un mes antes que en One X), el buque insignia en el estreno de One X que ya demuestra que se pueden lograr gráficos a 4K y 60 frames, o Crackdown 3 (7 de noviembre). El evento de Microsoft en el E3 ayer supuso toda una batería de títulos, y es seguro que podemos contar con versiones 4K de Assassin’s Creed Origins, Star Wars Battlefront 2, Need For Speed Payback y otros multis que saldrán a finales de año. Pero el resto de esos 42 juegos serán títulos ya lanzados en One que One X ‘reescalará’ a 4K igual que hace PS4 Pro.
Xbox One X Versus PS4 Pro
Ahora metámonos directamente en la comparativa que todo el mundo está haciendo. One X, la consola de Microsoft para jugar en 4K, contra PS4 Pro, la consola de Sony para jugar en 4K. Técnicamente y con las características en la mano, no cabe duda que One X es más potente que Pro. Tenemos una GPU nueva en One X, diseñada de forma personal por AMD para la consola, con 40 unidades personalizadas a 1.172Mhz frente a las 36 Radeon GCN a 911Mhz de Pro. En memoria también la supera, con 12GB GDDR5 frente a 8GB GDDR5 y 1GB DDR3, y 6 teraflops frente a 4,2 que le permiten más soltura para mover juego en 4K nativo. Básicamente a más memoria, más texturas de alta resolución a las que la GPU puede acceder con rapidez, lo que incrementa el rendimiento del sistema.
Con potencia también para su futura Realidad Virtual y la sorpresa de un tamaño más pequeño que la revisión de One S, One X tiene la misma ventaja de PS4 Pro en cuanto a poder mejorar juegos del catálogo de One que ya estén en el mercado. Pero además, gracias a la magia de la retrocompatibilidad, los títulos de Xbox 360 compatibles podrán jugarse también en One X, y además la sorpresa de la noche: también parte del catálogo de la primera Xbox, consola de hace 2 generaciones que salió a principios de siglo. Lo mejor es sin duda el sistema de refrigeración líquido anunciado en forma de un novedosos disipador del calor con una cámara de vapor similar al que tarjetas de Alta Gama como la GeForce GTX 1080 de Nvidia usa.
Es esta ventaja en el terreno de la GPU y la memoria lo que le da la ventaja técnica a Xbox One X y le permitirá mostrar juegos a 4K nativos de forma más eficiente que PS4 Pro. Ahora mismo Microsoft tiene una baza importante que aprovechar y puede que veamos en los próximos años IPs gráfica y técnicamente espectaculares, pero sólo el tiempo dirá si de verdad Microsoft aprovecha el potencial de su sistema y consigue la ventaja en el mercado. Porque si algo vende consolas, eso no son las promesas de mejores gráficos, de resoluciones novedosas ni nada: es simple y llanamente el catálogo de juegos exclusivos y no multiplataforma.
¿Merece la pena el 4K?
Para el que se lo esté preguntando, PS4 Pro es compatible con todos los juegos de PS4, y Xbox One X con los de One. Como decimos, básicamente son versiones mejoradas de las consolas estrenadas en 2013, no sistemas que parten de cero para crear una nueva generación. Microsoft mostró ayer varios títulos exclusivos de esos que convencen por sí solos, como Forza 7, el nuevo Ori, Crackdown 3 e indies del calibre de Cuphead -al fin tiene fecha. Pero comparado con los catálogos de Sony y Nintendo, Xbox sigue fallando en el terreno de los exclusivos. Ojo, que tiene sagas como Halo o Gears of War -ninguna vistas en el evento del E3 2017-, pero en sí es más la promesa de jugar en One X a la versión más potente de los títulos multiplataformas que aparezcan para ambos sistemas como Assassin’s Creed Origins, ya que por ejemplo bombazos como el Anthem de Bioware, por mucha exclusividad tipo Destiny que vaya a tener EA con Microsoft, es un multi que saldrá también para PS4.
Dicho lo cual hay que tener en cuenta un factor importante: si no se tiene una TV 4K en casa, el interés por PS4 Pro y Xbox One X no es precisamente alto porque como máximo podremos jugar a Full HD. Y si sí tenemos una pantalla 4K en casa, el mayor factor es el precio, ya que PS4 Pro ahora mismo son 400 euros, y Xbox One X son 500€. No cabe duda que aparte de los exclusivos de Microsoft, los multis se verán mejor en One X que en PS4 Pro -si los desarrolladores aprovechan sus ventajas, ojo-, pero juegos exclusivos de cada consola aparte, ya queda en la mano del jugador decidir qué tiene más importancia: si asegurarse de que los nuevos estrenos AAA los jugará a 4K nativos, o a unas 4K menos eficientes pero resolución 4K al fin y al cabo en un sistema mínimo 100 euros más barato.
Y para los que aún están en la Full HD. ¿Merece la pena pasarse a las 4K? En sí el aumento de resolución se nota, más en unos juegos que en otros y sobre todo a partir de los nuevos estrenos de este año -Horizon, God of War, Forza 7, Anthem. Pero tened en cuenta que las 4K implican una PS4 Pro o una Xbox One X más una TV 4K, lo que suma más de 1300-1400 euros mínimo, algo que en tiempos actuales es para pensárselo y bien. Hablamos de un mejor rendimiento gráfico y visual, pero en sí la experiencia a nivel de contenido y jugabilidad, de historia y duración de por ejemplo Anthem o Wolfenstein 2 será igual en PS4 que en PS4 Pro, y en Xbox One que en Xbox One X, sólo que se verá mejor y con mayor rendimiento, entrando más en un terreno de hardcore fans que del público general.