Irán, tiempo de rotaciones
Scariolo decidirá esta misma mañana si da descansos para medirse a Irán en el partido que cierra la primera fase. Letonia y Canadá, en el horizonte. Rudy Fernández alcanza a Juan Carlos Navarro.
“Entiendo que puede ser humano que la concentración se vaya hacia delante; pero hay que evitarlo, respetar a Irán y jugar de la manera más correcta”, reflexiona Sergio Scariolo en la pista auxiliar del Indonesia Arena mientras, a apenas metros, Canadá y Letonia están jugando el partido que decide el líder del grupo H. La relajación, lógicamente, es el gran peligro del España-Irán que cierra este miércoles (15:30 horas, TeleDeporte) la primera fase del Mundial para la Selección que defiende el título. El italiano, por cierto, atiende a los medios después de tener una charla calmada con Juancho Hernangómez mientras el embajador de España en Indonesia recibe de manos de Rudy Fernández una camiseta, obsequio de la Selección campeona.
El maestro de Brescia no desveló si dará descanso a alguno de sus jugadores, pero sí admitió que hablará con los doctores por la mañana. “Me darán algún consejo y, en función de lo que me digan, decidiré”. De momento, la rodilla izquierda de Alberto Díaz ha dejado de ser un problema. “Está muy bien, sin molestias. Perfecta”, aclara el base malagueño.
El partido es algo más que un trámite porque este formato de la FIBA arrastra todos los resultados de la primera fase a la segunda, con independencia de quién siga adelante. Eso le da cierto aire competitivo al partido. Scariolo también recuerda que esta Selección de la cultura del esfuerzo también tiene ya una marca. “Mucha gente viene a vernos, no por lo que hemos ganado, sino por cómo jugamos. Estamos orgullosos y, como cada grupo de música, tenemos que respetar cada etapa del tour, cada concierto”.
Entre los nuevos músicos está Juan Núñez, que está siendo la sensación de la primera fase. “Tiene 19 años, tenemos que cuidarlo”, avisa Alberto Díaz, que pese a su juventud ya ha quemado esas etapas en la que uno se convierte en tendencia y, poco después, es condenado a los infiernos. Para eso, nada mejor, tal vez, que ese “never too high, never too low” de Ricky Rubio, cuya camiseta cuelga cada noche de partido del Indonesia Arena y, ojalá, también lo haga la próxima semana en el Mall of Asia Arena de Manila. De momento, el calendario dice Irán. Así es como se llega lejos en los campeonatos. Y así se hacen cifras míticas. Rudy alcanza a Navarro en el Top-1: 253 internacionalidades.