Canadá, árbitros, Zagars, Francia… Lo mejor y lo peor del Mundial
El torneo intercontinental de Filipinas, Indonesia y Japón terminó este domingo con muchas buenas noticias, pero también malas.
Alemania conquistó el primer oro mundial de su historia en un torneo que puso su punto final este domingo en el Mall of Asia de Manila (Filipinas). Un campeonato con más de 90 partidos disputados en tres países asiáticos durante 16 días que ha dejado, al margen de Alemania, las buenas noticias de Canadá y el baloncesto africano, y las malas de Francia y la debilidad de Estados Unidos.
Lo mejor del Mundial
Alemania
El repaso a las más de dos semanas de Mundial no podía empezar sin hablar del nuevo campeón: Alemania. La selección germana fue la única invicta de un torneo en el que conquistaron el primer oro de su historia. Desde 1993, en el Eurobasket en Múnich en su país, no alcanzaba la cima del baloncesto. Una hazaña lograda por la generación post Nowitzki, liderada por el MVP Dennis Schroder, un jugador volcánico que guía a la camada de los Wagner, Obst y compañía. El paso hacia adelante del pasado Europeo se ha visto confirmado este verano.
Letonia
La gran sorpresa del Mundial. La selección báltica se presentaba en Asia sin Kristaps Porzingis, su gran estrella, y con muchas dudas… sobre todo, por el camino que debía andar durante el campeonato: la primera fase les juntó con Francia y Canadá, dos candidatos al oro, y dejó en la cuneta a los galos; la segunda, con España… que siguió el mismo camino que sus vecinos pirenaicos. Se colaron en cuartos, donde sucumbieron en un emociónate final contra Alemania: Bertans tuvo el triple para superar la ronda. Con el italiano Luca Banchi en el banquillo (mejor entrenador del Mundial), Letonia desarrolló un juego rápido, atrevido, con el triple como herramienta fundamental. El futuro es suyo.
Arturs Zagars
El base (23 años y 1,90 m) fue uno de los principales responsables del 5º puesto de Letonia en el Mundial. El canterano del Joventut, la temporada pasada en Lituania, ha realizado un torneo soberbio, valiente e inteligente. Ha controlado el ritmo de su equipo y ha cerrado con 12,4 puntos (41,7% desde el triple) y 7,4 asistencias, la quinta mejor marca del campeonato. Sus 17 pases a canasta frente a Lituania es el récord histórico en un Mundial. Su papel le ha puesto en el radar de media Europa.
África
El baloncesto africano ha dejado muy buen sabor de boca en este Mundial. Sudán del Sur, el país más joven del planeta, ha sido su punta de lanza, con tres victorias en cinco partidos que le ha valido el billete a sus primeros Juegos en el primer Mundial de siempre. Casi nada. La Cabo Verde de Walter Tavares fue divertida de ver al igual que Costa de Marfil: ambas rozaron la clasificación a la segunda fase.
Canadá
La selección norteamericana ha dejado cierto sabor agridulce. Por potencial, se la colocaba como ganadora del Mundial o, al menos, en la final. Y no ha sido así. Pero su bronce, tras ganar a Estados Unidos en el duelo por el tercer puesto, es su mejor posición en un Mundial que además le ha valido la clasificación para los Juegos de París 2024 tras estar ausente en los últimos cinco. Es su primer medalla desde… la plata de los Juegos de Berlín en 1936. Una proeza con el español Jordi Fernández en el banquillo, la explosión de Dillon Brooks y la consolidación de Shai como una estrella mundial.
Lo peor del Mundial
Estados Unidos
Un cuarto puesto para cualquier selección sería una gran noticia. Para Estados Unidos, no. La gran potencia del baloncesto mundial se ha quedado sin medalla por segundo torneo intercontinental seguido. Desde el periodo 1978-1982 no le ocurría algo semejante. Con jugadores NBA entre sus filas, nunca. Es un nuevo toque de atención para los norteamericanos, que nunca dieron sensación de superioridad en el Mundial, con derrotas dolorosas ante Lituania, que pudo ser escandalosa, y Alemania. Montenegro la puso en apuros. Llevar un equipo que no sea el A o el B ya no le sirve bien si quiere ganar.
Asia
Solo Japón, con un balance final de 3-2, puede sentirse orgulloso del campeonato que ha hecho. El resto de las selecciones asiáticas no han estado a la altura. Irán y Jordania no han ganado ni un solo partido. Preocupante China, con la sensación de que la evolución de su baloncesto se ha estancado.
Francia
La gran sorpresa del Mundial… para mal. La selección gala llegaba como una de las cinco candidatas a conquistar el oro. Por potencial de su plantilla y por historia, por el pasado más cercano, que la llevó a colgarse la plata en el Eurobasket 2022 tras caer con España en la final. Sin embargo, y con el billete a París 2024 en el bolsillo como anfitrión, Francia no estuvo a la altura. Ni cerca de ella. No alcanzaron ni la segunda fase tras ser vapuleados por Canadá (95-65) y derrotados por Letonia (86-88). Mal asunto a un año de los Juegos en su país y con más dudas que certezas.
Arbitraje
Es un tema que vuelve cada vez que hay un campeonato FIBA de selecciones. Sin los mejores árbitros en los torneos (los de Euroliga no están), el nivel en la dirección de los partidos es deficiente, con colegiados con muy poco experiencia en encuentros de alto nivel.
Cerveza filipina
Nadie quería tocar el tema hasta que Gordon Herbert lo puso sobre la mesa nada más conquistar el Mundial. “Me encanta Filipinas, pero tienen que conseguir mejores cervezas”, aseguró en rueda de prensa el seleccionador alemán.