Álex Mumbrú (Barcelona, 1979) ya sabe que la vida de los entrenadores da muchas vueltas. Después de un paso muy difícil por el Valencia Basket, y de ser destituido antes de acabar la temporada 2023-24 a pesar de que tenía otra más de contrato, inició un paréntesis finalmente breve en una trayectoria en los banquillos que había comenzado en Bilbao, donde pasó de ser capitán (nueve temporadas en el equipo, número 15 retirado) a convertirse en entrenador en 2018. En 2022 saltó al Valencia… y de ahí, en una noticia muy poco esperada en su momento, hace poco más de un año, al banquillo de Alemania, la selección campeona del mundo de baloncesto.

El resto era mayúsculo. Gordon Herbert había llevado al equipo al título mundial en 2023 y a las semifinales (finalmente sin medalla) en París 2024. Su salida, para hacerse cargo del Bayern en un baile de banquillos que mandó a Pablo Laso al Baskonia, dejó una vacante para la que la selección alemana buscó un entrenador joven que asumiera el reto con la máxima energía. De Mumbrú les gustaba el pedigrí, para de la enorme cultura ganadora del baloncesto español en los últimos lustros, y después, ya en las negociaciones, también el talante. Desde luego, la cosa ha salido bien: Mumbrú es campeón de Europa de baloncesto y, ahora mismo, el entrenador de una selección que es reina mundial y continental. Como España en 2022. Hasta la FIBA tendió después del partido un puente entre la cultura ganadora del baloncesto español en las dos últimas décadas y la figura del seleccionadora de la nueva campeona: “Y al final... de alguna manera, de algún modo, España ha vuelto a ganar”.

El barcelonés ha completado su trabajo con un mérito enorme: una pancreatitis aguda lo mandó al hospital el día antes del inicio del Eurobasket. Y no se pudo sentar en el banquillo hasta la segunda fase. Después de la victoria en octavos contra Portugal, se hizo a un lado y dejó que sus ayudantes, el serbio Alan Ibrahimagic y el también español Alberto Medina, tomara las riendas del equipo con él en un segundo plano, bajo mínimos por culpa de la inoportuna enfermedad.

Pero ya tiene su oro continental como entrenador, que se suma a su extraordinario palmarés en su trayectoria como jugador de la Selección española: campeón del mundo (2006) y de Europa (2009), tiene también una plata olímpica (Pekín 2008) y otras dos medallas en Eurobasket (2007 y 2013). Es el primer entrenador español que consigue ser campeón de Europa de selecciones en categoría masculina. Los cuatro oros de España llevan la firma de Sergio Scariolo (2009, 2011, 2015 y 2022) y en el Eurobasket femenino lo consiguieron Manuel Coloma y Lucas Mondelo. Pero no es el único hito con el que sale, además del oro, Mumbrú de este Eurobasket 2025: es el tercero que reúne en su palmarés los oros en el Eurobasket como jugador y entrenador. Hasta ahora lo habían conseguido el lituano Feliksas Kriauciunas (1937 y 1939) y el griego Panagiotis Giannakis (1987 y 2005).

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